La porra
—Un vinito, Juan, y apúntame a la porra.
—¿Qué te pongo?
—Un euro a Luis, dos a Jacinto.
—¿Jacinto? No sé yo, ¿no lo has visto últimamente? Está rejuvenecido, saliendo con una cubana...
—Me arriesgo… Por cierto, ¿quién ganó el mes pasado?
—Antonio… ¡pero hay bote! Apostó por sí mismo.
—¿Qué te pongo?
—Un euro a Luis, dos a Jacinto.
—¿Jacinto? No sé yo, ¿no lo has visto últimamente? Está rejuvenecido, saliendo con una cubana...
—Me arriesgo… Por cierto, ¿quién ganó el mes pasado?
—Antonio… ¡pero hay bote! Apostó por sí mismo.
Una interesante combinación de amistad en la Tercera Edad y humor negro, además de realismo. Bien hecho.
ResponderEliminar¡Gracias!
EliminarNada como mostrar la muerte desde el punto de vista más cotidiano.
Reconozco que la neurona no me ha funcionado a la primera: me lo he tenido que pensar antes de entenderte, Ignacio. Humor negro en primer grado. Tras una segunda lectura, va mi voto.
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