Antonio
Todo en la vida de Antonio era frágil, hasta su salud. Una tarde falleció. Al velorio asistieron sus compañeros de trabajo, división encomiendas, Correo Nacional. En el entierro al tomar las asas de ataúd, uno de ellos divisó al costado, en la madera, un cartel blanco con letras rojas, "FRÁGIL".
¿Deformación profesional de alguno de los compañeros? ¿Lo encargó él antes de morir? Muy curioso este relato. Me ha gustado. Saludos
ResponderEliminarMisterios que se han llevado a la tumba.
ResponderEliminarEstupendo, me estoy imaginando el mío...cuidado que es pesado...jajajja muy bueno.
ResponderEliminarDe los mejores que he leído
Gracias Raquel. Y la fragilidad de nuestro ser que representa la llegada de la muerte. Un abrazo.
EliminarURGENTE??
ResponderEliminar;)
Un saludo de La Marca Amarilla!!!
Gracias Miguel. Abrazo,.
EliminarYo me lo estaba imaginando cargándolo en un furgón de Seur. Antonio era frágil hasta en la muerte, imagino que querrá reciclar el envase en el Más Allá. Ameno.
ResponderEliminarSaludos.
Tan frágil como todos, como todas las vidas. Saludos Barlon.
EliminarLa fragilidad humana siempre, en la vida y hasta en la muerte, por mucho que nos creamos fuertes. Te ha quedado redondo, Daniel.
ResponderEliminarGracias Ángel, y es como tu dices, queremos ser duros ante la fragilidad. Abrazo.
ResponderEliminar