Condena

Se dio la vuelta y se dejó abrazar, disimulando sus lágrimas. Era la segunda noche consecutiva que le contestaba que Milagros si nacía niña y Constancio si resultaba varón; que se odiaba por su cobardía egoísta; que igual deberían hablar, pero callaba, mientras el DIU le abrasaba en su interior.
Escrito por Nicolás Jarque Alegre - Web
Elegido mejor relato de mayo de 2014

9 comentarios :

  1. Muy bueno Nicolás!! Ese DIU abrasa al final. sí señor!
    Suerte!
    :)

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  2. Me ha encantado, la repetición del "que" acentua el agobio que siente la protagonista y refleja también la ilusión de él. Muy buen micro. :)

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  3. La capacidad de controlar puede convertirnos en víctimas, o en verdugos (YouTube Anuncio Desigual #tudecides TV 2014).
    Un abrazo, Nicolás. Va mi "me gusta".

    Lola Pacheco

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  4. "Milagros" o "Constancio"...genial.

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  5. Me parece que contra la barrera del DIU ni la constancia ni un milagro van a poder. Cualquiera le quita la ilusión a ese varón de ideas fijas. Sí que deberían de hablar, aunque ello suponga un jarro de agua fría y el riesgo de reproches irreconciliables. No es extraño que el artilugio queme, pues la buena mujer está viviendo un infierno.
    Una situación doméstica aparentemente sencilla que encierra dentro una enorme disensión y hasta el germen de un posible drama.
    Me ha gustado mucho, Nicolás.
    Un abrazo

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  6. Genial, Jarque! Aquí no hay milagro , hay constancia!

    Un saludo! ;)

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  7. ¡Muchas gracias a todos por vuestros comentarios!

    Abrazos colectivos.

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  8. Lo encuentro perfecto Nicolás. Partiendo de una buena idea has hecho un trabajo literariamente precioso. Enhorabuena.

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  9. Vaya, ese DIU es un hachazo final que te deja clavado. Enhorabuena.

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