may082014

La deuda

Al morir, un hombre que había vivido en santidad notó con sorpresa cómo su alma descendía al infierno. "No te quejes —le reprendió el Diablo cuando llegó allí—: has dado tu vida por los demás y salvado muchas almas pecadoras. Es justo que yo ahora reclame lo que me pertenece".
Escrito por Cadillac Solitario

5 comentarios :

  1. Soledad García Garrido8/5/14, 22:00

    ¡Muy agudo! Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado la historia.He disfrutado al leerla.

    ResponderEliminar
  3. Cadillac Solitario9/5/14, 2:25

    Soledad, María del Carmen: gracias por vuestros comentarios; si os ha gustado, me doy por satisfecho.

    ResponderEliminar
  4. Si el Diablo se dio por satisfecho es porque salió ganando: donde se ponga la calidad, que se quite la cantidad. ¡Muy bueno!
    Fina

    ResponderEliminar
  5. Cadillac Solitario9/5/14, 21:25

    Fina: me alegro de que lo hayas disfrutado. Gracias por tu comentario.

    ResponderEliminar

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!