Zancudo impresionante
—Mami, ¿existen los zancudos gigantes? —inquirió la niñita.
—Claro que no, nadie ha visto uno —respondió calmadamente la madre.
—¿Seguro, mami? —insistió Mady casi sin abrir la boca, con gestos de terror, mientras contemplaba al insecto de casi un metro aletear cerca de su ventana.
—Seguro, hijita, puedes estar tranquila.
—Claro que no, nadie ha visto uno —respondió calmadamente la madre.
—¿Seguro, mami? —insistió Mady casi sin abrir la boca, con gestos de terror, mientras contemplaba al insecto de casi un metro aletear cerca de su ventana.
—Seguro, hijita, puedes estar tranquila.
Alguna vez habría que hacer algo más de caso a los niños, que son más sabios de lo que nos pensamos.
ResponderEliminarUn saludo, Óscar.