Amor eterno

Aquella lluviosa mañana de octubre prometimos vivir hasta la eternidad juntos y que nos amaríamos por siempre. Sin embargo, la muerte no distingue entre almas cándidas y almas pérfidas, merecedoras del ocaso. Te llevó antes a ti. A mí me dejó con el cuchillo manchado de sangre en las manos.
Escrito por Sara Lew - Web

8 comentarios :

  1. Y las palabras y las intenciones se las llevó el viento. Tremendo. Tienes mi "me gusta".
    Suerte Sara.

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  2. Un inesperado (y brutal) final que hace que lo leído adquiera un significado completamente diferente. Saludos.
    Fina

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  3. Sara, un amor mal entendido o quizás bien entendido, en cualquier caso un amor eterno que se queda pausado.

    Intrigante y muy bien hilvanado.

    ¡Suerte con el concurso!

    Abrazos.

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  4. Una frase muy manida nos dice eso de que hay amores que matan. Pero esto es falso de toda falsedad: si el amor mata, no puede nunca ser amor.
    Buen relato, Sara Lew. Va un 'Me gusta'.
    Saludos.

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  5. La muerte tiene la culpa: siempre se lleva a los inocentes primero... Y el asesino lo sabe.

    ¡Gracias por vuestros comentarios!

    Abrazos.

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  6. Al final va a ser cierto que nada es eterno, o que se le llama "amor" a cualquier cosa. Una gran verdad, al tiempo que triste,la que expones de que la muerte no distingue entre unas almas y otras.
    Buen relato, Sara.
    Saludos

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  7. Terrible y muy bien contado! Felicidades Sara, María Ordóñez

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