Maravillosos objetivos
La pequeña Ana conseguía llegar en cinco minutos desde el colegio a casa, pese a la larga distancia. Su secreto residía en estar preparada antes de que sonara la sirena, y en no entretenerse. Sabía que en su casa le esperaban su cachorro Tommy, su madre y una opípara merienda.
Sencillo pero sincero. Muy bonito Gloria. Me gusta.
ResponderEliminarGracias Isidro. Narró una tarde cualquiera y la vuelta del colé hacia un hogar acogedor. Ojalá todos los niños lo tuvieran.
EliminarUn abrazo de Gloria