22 de diciembre
Aceleró el paso. Deseaba dejar atrás lo antes posible aquella algarabía de anhelados reencuentros, risas, carcajadas y atropelladas preguntas aderezada con besos y efusivos abrazos. Al llegar al mostrador, entregó su billete.
—¿Destino final Katmandú?
Afirmó con un movimiento de cabeza. Había leído que en Nepal nadie celebra la Navidad.
—¿Destino final Katmandú?
Afirmó con un movimiento de cabeza. Había leído que en Nepal nadie celebra la Navidad.
Muy bueno Fina, créeme que más de uno lo desea y más de una vez yo he deseado hacerlo.
ResponderEliminarUn beso.
Malu.
Hay fechas en las que se hacen mucho más visibles las dos caras de una misma moneda. Gracias por tu comentario, Malu y ¡Feliz Navidad!
ResponderEliminarUn beso.
Fina
Estas fiestas es lo que tienen, producen una adhesión absoluta, o suscitan ganas de huir de ellas.
ResponderEliminarNo sé en qué grupo estás tú, o si tienes un poco de ambos, según el momento. En todo caso, te deseo que pases una feliz Navidad y te mando un saludo
Gracias, Ángel. Felices Fiestas para ti también.
EliminarSaludos.
Fina
Son fechas muy estereotipadas en las que de algún modo tenemos interiorizado qué cosas hay que hacer, como, cuando y con quien. Todo lo que se salga de ese guión se puede convertir en un foco de estrés. Total, que después de este rollo, Feliz Navidad, Fina y para el resto de la comunidad de cincuenta palabras.
ResponderEliminarJoaquín Grau
Feliz Navidad, Grau, y me uno a tu felicitación colectiva.
EliminarUn abrazo.
Fina
Espero que a tu protagonista no la reciba en el aeropuerto una coral de villancicos.
ResponderEliminarLa verdad es que veces dan ganas de salir corriendo y volver después de reyes. A mí en particular no me gustan las navidades, pero me dejo llevar, y en ocasiones hasta me lo paso bien.
Un abrazo, Fina, y Felices Fiestas.
¿Te imaginas que coincidan en el avión en un trayecto tan largo? (je, je, je).
EliminarFelices Fiestas, Enrique.
Un saludo.
Fina
Es lo que tiene estas fechas, que uno a veces no sabe si viene o va. Yo mismo, hasta hoy (y han pasado unos cuantos días) no he podido leer con tranquilidad tu relato, Fina. Y no he estado en Nepal. Pero aprovecho ahora (nunca es tarde) para desearte lo mejor en las Navidades o en lo que buenamenta venga después, y para darte mi enhorabuena por tus cincuenta palabras ajenas a la época.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo (y mi 'Me gusta').