Intermezzo (II)

Deseó poder volver sobre sus pasos. Habría advertido a quienes aún lo seguían velando que no se trataba de una leyenda urbana. Cuando sus ojos consiguieron habituarse a la cegadora luz que le había dado la bienvenida, se vio solo frente a un letrero:

Cerrado en Navidad. Disculpen las molestias.
Escrito por FNR
Parte I | Parte II | Parte III

12 comentarios :

  1. Vaya recibimiento... ;)

    Joaquin Grau

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No me quieras hacer creer que ya no recuerdas que las vacaciones son sagradas, oye ;)
      Fina

      Eliminar
    2. Claro que si. Pero al menos unos servicios minimos, ¿no? Ya veremos como acaba la historia de ese pobre hombre... ? ;)
      Joaquin Grau

      Eliminar
  2. Nada es ya como era antes de la crisis. Hasta San Pedro se ha relajado laboralmente. Y no hay ni para subalternos.
    Muy bueno, Fina. Con final sorprendente. Como debe ser.
    Va un 'Me gusta' y un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, José Antonio. En los últimos años hemos asistido a recortes en algunas partidas que clamaban al cielo y allá arriba no han tenido más remedio que solidarizarse. O eso o han pensado que San Pedro tendría demasiado trabajo buscándose un sustituto en comparación con el cometido al que a éste le esperaba.
      Un abrazo.
      Fina

      Eliminar
  3. Es que hay cosas que no conviene hacer en ciertas fechas. El pobre ahora tendrá que estar en el limbo hasta que regrese San Pedro de esos días libres que se ha tomado.
    Gracias a tu relato ya sabemos que lo de la luz no es una leyenda.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo malo es que en determinadas fechas nos encontramos con un desbarajuste, ya que la parca sí que no descansa y está siempre al pie del cañón, más aún en según qué ocasiones.
      En cuanto a la luz, yo seguiré creyendo en ella hasta que no se me demuestre cuán equivocada estoy ;)
      Gracias por tu comentario, Ángel.
      Saludos.
      Fina

      Eliminar
  4. Hasta en esos sitios llega la P. crisis. En otros tiempos habría gente de sobra para atender domingos y festivos.
    Y es que los recortes no perdonan ni a San Pedro!!!
    Me gusta.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La crisis, los recortes... Sólo cabe esperar que por allá arriba no se vean obligados a colgar el cartelito definitivo por falta de actividad.
      Gracias por tus palabras, Isidro.
      Saludos.
      Fina

      Eliminar
  5. ¡Qué planchazo llegar a ese final tras el penoso trance! Me le imagino esperando pacientemente, sin prisas, frente a la puerta la apertura del negocio…
    Es un magnífico final, Fina, me ha encantado. Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. O mucho me equivoco o esa espera no será eterna. Cosa distinta es que se le haga eterna, claro.
      Gracias por tus palabras, Mª Jesús.
      Saludos.
      Fina

      Eliminar
  6. ¡Qué bueno Fina! Algo tan dramático tratado con un humor exquisito.
    Besos.
    Malu.

    ResponderEliminar

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!