Los caminos del Señor son inescrutables

Ella siempre quiso ser una niña pija, de esas que dicen "o sea" con cada movimiento de pelo.

Educada en los mejores colegios, cum laude por Cambridge y ajuar escrupulosamente preparado desde la adolescencia, María encontró su camino y desde hace años se levanta a las seis para rezar los maitines.
Escrito por Malu

16 comentarios :

  1. Una cosa está clara: nunca hay nada claro. Quién sabe dónde, cómo y con quién vamos a terminar. Tu protagonista, quizá destinada a ser directora de una sucursal o una alta ejecutiva, tuvo y siguió una llamada divina. Seguro que su preparación también resulta útil en el ambiente que ha elegido.
    Saludos, Malu
    Saludos

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    1. La verdad es que nunca hay nada claro, eso sí que es cierto.
      Yo no entiendo muy bien el tema de la vocación, pero sí que es cierto que me llamó muchísimo la atención el monasterio de la Ascensión de Nuestro Señor o convento de Santa Clara de monjas Clarisas en Lerma (Burgos), donde hay monjas de clausura jovencísimas, todas con titulaciones universitarias. Tenía que escribir algo sobre esto y bueno, salieron estas 50 palabras ...
      Como siempre, Ángel, muchas gracias por tu comentario.
      Besos.
      Malu.

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  2. Conozco unas cuantas así, lo que hay saber es a que dedica el tiempo libre.

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    1. Yo no conozco a nadie Jorge, pero es muy curioso, ¿verdad?
      supongo que el tiempo libre lo dedican al Señor ...
      Besos.
      Malu.

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  3. ¿Y quién está seguro de cómo vamos a terminar cada uno de nosotros?, quizás el destino nos tiene preparada alguna sorpresa increíble a la vuelta de la esquina. Y al final qué importa ser pija, beata, o astronauta... lo importante es ser feliz.
    Me ha gustado, como siempre.

    Un abrazo, Malu.

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    1. Ahí está Mª Jesús, lo importante es ser feliz con lo que cada uno elija, por mucho que quieran orientarnos o influenciarnos, lo ideal sería acabar haciendo lo que a cada uno le haga feliz.
      Gracias por comentar.
      Besos.
      Malu.

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  4. Muchos acaban siendo como les dicen que tienen que ser pero muchos otros tienen la suerte de ser lo que quisieron y pensaron siempre. Me encanta leerte Malu. Un besazo

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    1. Gracias Bea, me alegra muchísimo leer que te gusta.
      Un beso.
      Malu.

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  5. Y porqué no,la llamada de Dios,también es escuchada por los que creemos materialistas, corregida la falta,tendrá mucho que ofrecer a los demás.Me gusta

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    1. Muchas gracias. Me alegro que te guste.
      Besos.
      Malu.

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  6. Pues a mí, sinceramente, si hace un tiempo alguno de mis hijos me dice después de acabar la carrera, que se mete a cura o monja, me habría dado un disgusto, pero ahora, como está la cosa, al menos estaría tranquilo porque faltas no iba a pasar. El caso de tu chica es diferente, no es por necesidad y si, como dices, lleva años así, tampoco es por jugar a remediar, que decía Cecilia. Me alegro por ella, y me alegro también de leer estos relatos tuyos que siempre hacen pensar.
    Besos, Malu.
    Enrique Mochón.

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  7. Pues yo, sinceramente, Enrique, no quiero que mis hijas sigan ese camino, pero los padres estamos para dar alas y no raíces, así que ... habrá que aceptar los designios del Señor, sean los que sean.
    Gracias por tus comentarios. Me alegra que te hagan pensar, es lo que trato en estas 50 palabras y en todas las que dejo por aquí.
    Un beso.
    Malu.

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  8. Estamos de acuerdo entonces, Malu; ni tan siquiera me gusta influirles en esas decisiones tan importantes, independientemente de lo que pueda pensar al respecto.
    Besos.
    Enrique.

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    1. Así, es ... Les podemos aconsejar o dar nuestra opinión, pero los que deciden son ellos ...
      Besos Enrique.
      Malu.

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  9. No tengo palabras. Ni siquiera las de Dios (¡¡... te alabamos Señor!!). Buen relato, Malu. Es un placer leerte. Va mi 'Me gusta' y, como alguna que otra vez digo, mi reconocimiento.
    Besos.

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    1. Muchas gracias José Antonio. Un placer para mí también leer tus comentarios. Y mi reconocimiento para ti por dejar siempre unas palabras tan bonitas.
      Besos.
      Malu.

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