Adaptación
Segunda noche. Aún alza la vista hacia el umbral de la puerta pero pronto se distrae con la montaña de juguetes que hemos colocado a su lado. Ya casi ni llora. Seguro que a la tercera no recordará a la mujer de ojos brillantes y sonrisa estúpidamente feliz del parque.
Es muy bueno y tremendo.
ResponderEliminarLamentablemente no estoy de acuerdo con el prota: el niño no olvidará a su madre, puede que incluso cuando crezca se decida a buscarla.
Gracias Luisa por comentar.
EliminarSi te ha gustado me doy por satisfecho. Seguramente no la olvidará pero...quizá el mal ya esté hecho.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
¡Qué terrible historia y qué bien narrada ¡Bravo!
ResponderEliminarVa mi 'Me gusta' y un saludo.
Gracias José por comentar y por tus palabras.
EliminarUn saludo indio
Mitakuye oyasin
Una narración tan fría y aséptica como su contenido. ¡Bravo! Lo mejor, el título.
ResponderEliminarGracias Patricia por comentar.
EliminarMe gusta que te hayas fijado en el título, no siempre es fácil acertar.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
David, dime que no es un secuestro, por favor. No voy a poder dormir esta noche.
ResponderEliminarEnhorabuena, me gustan los relatos de impacto. Suerte.
Gracias Rafa por comentar.
EliminarTe diré que estás en lo cierto, por cruel y tenso que parezca. Trato de impactar, no siempre lo consigo...
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Hoy, los cuentos son muy terribles.
ResponderEliminarMe ha hecho reflexionar.
Enhorabuena
Gracias María Jesús por comentar.
EliminarÉste me salió así...tampoco está mal si te ha hecho reflexionar.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Un drama o una salvación, en todo caso, un relato redondo en el que lo importante es lo que no se dice pero está sucediendo, con un título muy apropiado.
ResponderEliminarNo es la primera vez que lo veo, pero me gusta ese saludo indio, a juego con el avatar.
Ahí va mi saludo
Gracias Ángel por comentar.
ResponderEliminarMe gusta que lo veas redondo, en este caso pesa más el drama para esa madre de sonrisa estúpidamente feliz... es terrorrifico que la salvación de los secuestradores sea esa ¿no?
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
En cualquier caso es una situación injusta e inestable que se mantiene al cerrar la historia transmitiendo desasosiego al lector. Muy buen relato, David, por lo que cuenta y por la maestría con que lo hace.
ResponderEliminarSaludos y felicitaciones.
Gracias Enrique por comentar.
EliminarCreo que conseguí darle el efecto que quería de tensión y desasosiego que dices, al menos en ti...
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Uff simplemente demoledor.
ResponderEliminarGracias Miguel Ángel por comentar aquí.
ResponderEliminarMe quedo con ese Uff tuyo, muy expresivo.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin