El cuadro
Mi hogar estaba envuelto en llamas. Era el esperado día del año en que mi cuadro se transformaba.
Al girarme lo vi. Donde antes estaba mi casa, ahora la pintura mostraba unas ruinosas cenizas y un esqueleto.
El cuadro quería salvarme, mas mi mente descifró su macabro mensaje demasiado tarde.
Al girarme lo vi. Donde antes estaba mi casa, ahora la pintura mostraba unas ruinosas cenizas y un esqueleto.
El cuadro quería salvarme, mas mi mente descifró su macabro mensaje demasiado tarde.
Es una pena que este hombre no supiera interpretar a tiempo las señales de su ¿propia obra?
ResponderEliminarTrágico relato de corte fantástico, muy bien construido, cuyas imágenes permanecen en la mente, aunque a mí sobre todo me ha quedado una fuerte sensación de soledad que de algún modo va implícita en él.
Me ha gustado bastante, Pablo.
Enhorabuena y un abrazo.
Muchas gracias por tus palabras, Enrique.
EliminarHas estado muy atinado pensando que el cuadro es obra del protagonista.
Podemos adornar la historia convirténdolo, como tú dices, en un personaje solitario que vive en una casa alejada de un pueblo, embrujada por anteriores inquilinos que, mediante el cuadro, quieren avisarle de lo que le depara, y finalmente, la superstición de los habitantes del pueblo, hace que una noche aparezcan con antorchas para quemar ese hogar embrujado desde hace muchos siglos.
Una posible historia podría ser esa. Como siempre digo, el lector puede dar otro giro a la historia, el que más le guste.
Un gustazo tu comentario como siempre.
Un fuerte abrazo.
Recuerda El Retrato de Dorian Gray, con una vuelta de tuerca. ¡Muy bueno!
ResponderEliminarFaroni
Me alegra que te haya gustado, Faroni (genial tu nombre, yo que soy un enamorado de la literatura de Luis Landero me quito el sombrero).
EliminarLlevas razón en que puede recordar a 'El Retrato de Dorian Gray' por el protagonismo que toma un cuadro, aunque esta vez desde otro punto de vista, como bien dices.
Un saludo y muchas gracias por tu comentario.
Como a Faroni, tu texto también me ha recordado a 'El retrato de Dorian Gray', sólo que en tu caso la pintura ejerce un papel premonitorio y no a posteriori, una idea interesante que podría ser el germen de muchas historias, con un toque inquietante. Quizá tendríamos que fijarnos más en los objetos cotidianos para leer en ellos señales del futuro.
ResponderEliminarUn abrazo, Pablo
Hola Ángel.
EliminarEl que una pintura cobre vida es algo que siempre me ha parecido una buena pieza de toque para crear un clima, como poco, escalofriante, Aunque el más famoso es el 'Retrato de Dorian Gray', hay algunos relatos con cuadros, en los que han tomado un protagonismo bastante curioso. Incluso el cine ha dado mucha fama a algunos cuadros como el de 'Rebeca', 'Laura' (guiones adaptados de sendas novelas) o 'La mujer del cuadro'. He aprovechado para mi historia el sin fin de posibilidades que da un inocente cuadro para fantasear, convirtiéndolo en un espejo del futuro.
Un abrazo, Ángel y como siempre, gracias por tus estupendos comentarios.
Pablo
Me ha encantado el relato. Fantasía, premoniciones del destino y cierto humor negro.
ResponderEliminarCon muy pocas frases has conseguido llevarnos a un escenario de incertidumbre y terror, en la mejor tradición gótica.
Me gusta la idea del destino que a través de un cuadro intenta avisar al protagonista de un futuro del que no podrá escapar. Una historia que contiene muchas otras. En la pintura, o mejor dicho, en algunos cuadros, hay algo en ellos que genera cierta incertidumbre o miedo...como si escondiera mensajes o fuera a tomar vida en cualquier momento. Como si ciertos cuadros fueran una ventana a otra dimensión que intenta hablarnos sin ser escuchada.
Creo que a partir de ahora voy a ver con doble intención los cuadros de mi casa...por si acaso.
Enhorabuena Pablo.
Hola Eduardo.
EliminarPoco puedo añadir al análisis tan exhaustivo que has hecho de mi relato.
Me encanta lo que dices y me alegra mucho que te haya gustado tanto.
Espero que los cuadros de tu casa sean de temáticas agradables.
Un abrazo, Eduardo y mil gracias de verdad por tan agradables palabras.
Pablo
Es un fantástico relato, Pablo. Enhorabuena.
ResponderEliminarYo, si fuera el protagonista de tu historia, buscaría al pintor del cuadro. No vaya a ser que hubiera pintado otros ...
¡Hola, Antonio!
EliminarMe alegra mucho que te haya gustado.
El pintor del cuadro pudo ser el mismo protagonista así que, si alguien tiene en su casa alguno de él, que tenga cuidado con los posibles mensajes subliminares que pueda encontrar.
Muchas gracias por tus palabras, Antonio. Me alegra mucho que te haya gustado.
Un abrazo.
Pablo
Me voy a repetir como Faroni y Ángel, tu relato también me ha recordado a un libro, pero no al Retrato de Dorian Gray, sino a uno de Edgar Allan Poe, The black Cat, la parte en la que se incendia la casa y en la única pared que queda en la casa aparece la imagen del amado y odiado gato negro del protagonista ...
ResponderEliminarSin duda tu relato no nos ha dejado indiferente a nadie.
Enhorabuena Pablo.
Besos.
Malu.
¡Hola, Malu!
EliminarNo se me había ocurrido la posible semejanza con uno de mis cuentos favoritos de Poe, ''The black Cat' o 'El gato negro', hasta que tu interpretación me ha abierto los ojos. Ésto es lo maravilloso de leer los diferentes puntos de vista que tenéis cada uno a partir del mismo relato. Me encantan y sorprenden. En este caso, hasta me hace pensar si el cuadro habrá acabado entre las cenizas o, en cambio, tras el fuego permanecerá intacto.
Y ya puestos, si ha sobrevivido al incendio ¿Con qué imagen? ¿Con la casa, o con las ruinosas cenizas y el esqueleto?
Te agradezco enormemente tus palabras. Hacéis que el relato continúe vivo y me sigan surgiendo nuevas posibilidades de como podría continuar la historia.
Me enriquecen mucho vuestros comentarios.
Muchísimas gracias, Malu
Besos.
Pablo
Fantástico relato. Por la espalda me ha recorrido un pequeño escalofrío.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Enhorabuena
Hola,María.
EliminarMe alegro que te haya gustado el relato. Solo espero que ese escalofrío que te ha rondado por la espalda no haya sido del todo desagradable.
Muchas gracias por tus palabras.
Un abrazo.
Pablo
No se si me gustaria tener ese cuadro pero me ha gustado mucho tu relato con ese toque de suspense tan bien expresado. Ahora cada vez que paso por delante de un cuadro que tengo en el que sale el mar, lo miro de reojo temiendo un tsunami en el comedor de mi casa... Un abrazo, Pablo.
ResponderEliminarJoaquín Grau
¡Hola, Joaquín!
EliminarEsperemos que el cuadro de tu casa solo provoque, si acaso, una suave brisa marina ; )
Muchas gracias por tu comentario. Me alegra mucho que te haya gustado y que me hayas dedicado tan amables palabras.
Un fuerte abrazo, Joaquín.
Pablo.
No sé si me gusta más tu relato o tus respuestas a los comentarios, no sé.
ResponderEliminarDe lo que estoy segura es de que disfruto leyéndote.
Muchas suerte.
Un saludo, Pablo.
Margarita, de lo que yo estoy seguro es que comentarios como el tuyo me llenan de felicidad y me dejan una sonrisilla en la comisura de los labios que será difícil de quitar.
EliminarGracias por alegrarme el día, tanto por tus palabras, como por enseñarme que la filosofía matemática es una de las asignaturas más bellas que existen.
Un saludo.
Pablo.