Mis paisajes
Los pinos, con sus azules hojas de aguja apuntando al cielo rosa, casi llegan al mar de templadas aguas de color naranja que lamen las verdes y finas arenas de la playa.
Falté a las clases de los colores y nunca me los aprendí, pero me encanta que me corrijáis.
Falté a las clases de los colores y nunca me los aprendí, pero me encanta que me corrijáis.
Isidro, ¿y si a los demás nos enseñaron mal los colores y es tu protagonista el que lleva razón?
ResponderEliminarMuy imaginativo.
Saludos.
Pablo
¡Muy agudo Pablo! Además también el color es relativo, pues es según el cristal con que se miren.
EliminarGracias por tu comentario y un abrazo.
Con los colores pasa como con los gustos. De hecho existe la expresión "Para gustos, colores". Este microrrelato, Isidro, me ha gustado, sobre todo por los colores.
ResponderEliminarVa mi "Me gusta" y un saludo... arcoíris.
Tu tienes buen ojo para los colores a juzgar por tu foto de presentación, jejeje!
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Un abrazo.
Conforme leía tu micro me he ido imaginando el cuadro que nos has descrito pincelada a pincelada. Me ha gustado mucho, Isidro, la idea de romper con lo convencional y poder crear nuestro propio paisaje. Saludos.
ResponderEliminarSi lo buscas lo encontrarás. Tu ya lo has encontrado. Enhorabuena a tí y a tu imaginación.
EliminarGracias y un abrazo.
¿Y por qué te vamos a corregir si es "tu" paisaje, único e irrepetible? Ya me lo estoy imaginando... ¿Portada para el próximo libro de 50 Palabras?
ResponderEliminar¡Eres grande Patricia!
EliminarEse paisaje existe. Es una de las muchas calas de la Costa Brava. Está escondida y para accceder a ella se ha de tener el carnet de "La imaginación"
Gracias por tu comentario.
Besos
Ya sabes aquello de que las cosas se ven según el cristal con el que se mira. Si tú lo ves así será porque tienes una sensibilidad que te distingue, de ahí a crear una obra única sólo hay un paso.
ResponderEliminarUn abrazo, Isidro
Gracias amigo Angel.
EliminarUn abrazo
No se me ocurriría. El paisaje y sus colores están bien.
ResponderEliminarNo cambies nada, ni colores ni comas
Isidro, me ha encantado. Nada más leerlo me he ido a la Costa Brava, después he visto ese lienzo colgado en mi salón, ahora sólo me falta el pintor y... Manos a la obra. Cuando he leído el comentario de Juana y después el tuyo me he dado cuenta de que no soy nada original, pero bueno, me alegra ver que estamos en sintonía.
ResponderEliminarUn beso y por muchos cuadros de diferentes colores.
Malu.
Muchas gracias Malú. Encantado de estar en sintonía contigo.
EliminarUn beso.
Original tu micro, original ese paisaje...
ResponderEliminarMuy ocurrente.
Saludos
Muchas gracias Rosy.
EliminarSaludos.
Feo y malo tu relato, Isidro; nada que ver, por ejemplo, con aquellas apasionantes clases, a las que nunca fui, sobre adjetivos.
ResponderEliminarSaludos.
Me has convencido de que hay que asistir tanto a las clases de los colores como de los adjetivos. Jejeje!
EliminarUn abrazo
Un colorido abrazo!!
EliminarMe he sentido como en casa, Isidro. Es lo que tiene vivir entre daltónicos. Y aquí los tengo, diciéndome "¿Ves como la equivocada eres tú?". Pues van a tener razón.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias Margarita. En la próxima fiesta de daltónicos iremos de invitados de honor. jejeje!
EliminarSaludos.
Bonito cuadro para tenerlo en el salón y contemplarlo esos días un tanto grises. ¿Por cuánto dices que lo vendes? ;)
ResponderEliminarSaludos
Fina... a tí, te lo regalo.
EliminarMuchas gracias
Saludos
Fantástico tu relato totalmente "naif", donde los colores ingenuos e improvisados sintonizan con la técnica infantil de pintarlos caprichosamente. No te disculpes, que nadie te va a corregir; te ha quedado un cuadro soberbio.
ResponderEliminarUn abrazo, Isidro.
La verdad es que entre lo "naif", lo daltónico, las faltas a clases de los adjetivos y de los colores, los gustos, el cristal con que se mira... Con todos estos retales, puedo hacer una novela. ¿O un traje?
EliminarMuchas gracias y un abrazo.
Como "experto" en colores, puedo decir que los nombres que les asignamos son meras convenciones que utilizamos en aras de la comunicación, pero no reflejan necesariamente lo que realmente percibimos cada uno de nosotros.
ResponderEliminarDesde este punto de vista, me gusta tu relato porque reivindica la libertad de ser uno mismo y no dejarse encorsetar por lo que digan los demás.
Saludos cordiales, Isidro
Gracias Notincgas.
EliminarSi te gusta, podrías haber pinchado al "Me gusta" ¡Digo yo!, jejeje!
Un abrazo.
Bravo, Isidro. Muy ocurrente tu relato.
ResponderEliminarAbrazo y suerte.
¡Gracias padrino!
ResponderEliminarAbrazo.
Para un artista, la realidad es como la quiera pintar para que nos transmita alguna emoción o sentimiento. Tu relato es una imagen abstracta, un juego de colores que has dibujado muy bien con palabras. Suerte.
ResponderEliminarSaludos.
En la imaginación no hay reglas. No hay nada que corregir. Perfecto!
ResponderEliminarSaludos Isidro!
Sandra.