Crónica del absurdo
Había escrito cien veces "te amo". En los espejos, en las paredes hirientes de su casa, en su amoratado cuerpo... Nada le parecía suficiente para demostrar cuánto la amaba. Por ello su enfermizo cerebro no entendía que tras el postrero golpe ella, exhausta, no exhalara ni siquiera un "te quiero".
Madre mia qué loco más bueno nos has pintado. Magnífico micro/denuncia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Rosy. Una realidad que no debería existir. Esa locura que les vuelve ciegos hasta provocar el dolor más extremo en sus parejas. Y dicen que las aman...
EliminarMuy bueno, Belén. Has dado justo en el clavo. Este tipo de personas piensan que con un "lo hago porque te amo" pueden justificar su bestialidad. Me ha gustado mucho cómo lo has contado. Un saludo.
ResponderEliminarGracias Matrioska. Exacto, otra frase irracional y absurda como la de "la maté porque era mía". Abrazos.
EliminarLo que significa no entender que el amor no siempre ha de ser correspondido y pensar que solo por amar a una persona, nos pertenece. Tan duro como triste e inconcebiblemente real. Suerte Belén.
ResponderEliminarEstas mentes perturbadas distorsionan el sentido del amor, son locos posesivos y dementes capaces de matar y no sentir por lo que ellos denominan"amor".Un beso.
EliminarAmar hasta la muerte. En la enfermedad y la locura, cuando el amor perturba. Un excelente relato cadavérico.
ResponderEliminarGracias Ricardo. Amar en la salud y en la enfermedad entendida de una manera perturbada y distorsionada por una mente enferma. Desgraciadamente no solo es un relato, ojala, es una realidad que nos bombardea casi cada día.
EliminarUn abrazo.
Acudiendo a una frase hecha, en tu relato se destila el consabido "Hay amores que matan". Y algunos aún siguen llamándolo "amor"...
ResponderEliminarMuy buen microrrelato, María Belén. Va mi "Me gusta" junto a mis deseos de que tengas mucha suerte.
Un saludo.
Gracias José Antonio por tu "me gusta" y por tus deseos.
EliminarDesearía que el amor matara al amor en una metáfora infinita, tristemente solo es una utopía en algunos casos.
un abrazo de gratitud.
Buen relato, Belén, a pesar de que ponga los pelos de punta.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Margarita. una realidad que siempre nos causa esa sensación. Gracias a Dios no nos acostumbramos a ella.
EliminarEl amor es incompatible con la destrucción. El amor se cuida, se mima, se riega cada día, se preserva, lo contrario es pervertir el término, justificar el egoísmo malsano, el fruto de una mente enferma y dañina. Parece mentira que en una sociedad a la que suponemos civilizada no termine este goteo de casos, que al final es riada. Cuanto se diga es poco y hay que expresarlo en toda su crudeza y sin matices, para que produzca la necesaria indignación, como tú has sabido hacerlo.
ResponderEliminarUn abrazo María Belén
Gracias a ti Angel. Casi quitamos mi texto y ponemos el tuyo, jajaja..
EliminarUn análisis perfecto de la sociedad que nos rodea, de los locos con vidas en apariencia normales y que en la intimidad se trasforman en seres depredadores con mentes enfermizas que siembran el horror y la violencia allá donde depositan su frío y estúpido corazón de piedra.
Un abrazo grande.
Has plasmado magníficamente esa lacra atemporal que no entiende de raza, nivel cultural ni clase social. Enhorabuena y suerte, Belén.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Fina. Me encanta tu comentario Lacra atemporal, es cierta. Un peso en la sociedad actual que tendría que extinguirse. ojala no quede solo en una utopía. Un beso.
EliminarDuro el tema que tratas, Belén, pero muy bien contado.
ResponderEliminarPor aquí ha salido muchas veces la frase "en el amor y en la guerra, todo vale". Pero en este caso, eso no es amor, es enfermedad, es lacra como dice Fina, es destrucción como dice Ángel, es una bestialidad que ojalá desaparezca y no azote más en nuestra sociedad.
Besos.
Malu.
Gracias Malu. Grandes verdades dices, personas enfermas que enferman a sus parejas, les amargan, les insultan y en el último extremo las matan. un lacra a la que no nos acostumbramos y deseamos que desaparezca.
Eliminarun beso.