Sin memoria
Y olvidando todo lo que fue y todo lo que hubo se marchó. Allí me quedé con el vacío de la nada llenándome por dentro. Desde entonces me ha quedado la incertidumbre de si se fue en paz por no recordar o se fue sufriendo por no poder recordar nada.
El vacío, la nada, la incertidumbre, los recuerdos... Preciosa mezcla de sentimientos, tristes, pero humanos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Excelente juego de palabras que llenan un vacío, además de que se albergan en nuestra memoria.
ResponderEliminarPrefiero pensar que es la primera opción, por lo menos, para el que se queda, es más gratificante, aunque realmente nunca lo sabremos...
ResponderEliminarUn emotivo, aunque muy crudo, micro. Me ha gustado mucho.
Podría tratarse de alguien cercano a una persona que sufrió Alzheimer?
ResponderEliminarEl relato está bien, pero lo que me gusta de verdad es la última pregunta que se hace. En respuesta a esa posible pregunta, yo he conocido a una persona con Alzheimer y siempre me dió la impresión de que, aunque no me reconociera, sí había una sensación de "tú a mí me suenas, pero no se decirte quien eres". Sin embargo también creo que no hay realmente ese tormento, porque de alguna manera la persona se desconecta de este tipo de pensamientos...Bueno, todo eso en caso de que se trate de una persona con Alzheimer y no de un golpe en la cabeza!,... eso lo aclarará Cuarta Lobo, espero.
Se te echaba de menos. Me alegra leerte. Me encanta tu nuevo nombre y todo lo que sugiere.
EliminarUn fuerte abrazo.
Pablo
Hola Pablo, es que el conductor se llama Rorschach. En realidad no sugiero nada, es un superhéroe y me llamó la atención en Watchmen (aunque entiendo lo que quieres decir).
EliminarPero tú si que eres un Watchmen, no se te escapa ninguna...;-)
Me encanta Watchmen, y por supuesto su Rorschach.
EliminarMe gusta muchísimo la combinación de palabras, puede ser un personaje que se fue al otro mundo sin memoria, pero no sé por qué he pensado en el fin de una relación donde el que se va decide que lo olvida todo.
ResponderEliminarEnhorabuena por el relato.
Besos.
Malu.
Para pensar... Duele.
ResponderEliminarCoincido en la lectura que ha hecho Rorschach. Yo también lo veo como el relato de la pérdida de un ser querido que padece de alzhéimer. En cualquier caso, me ha parecido un bello ejemplo de prosa poética. Suerte, Cuarta Lobo.
ResponderEliminarUn saludo.
Fina
Cuarta Lobo. Me ha gustado tu micro y sobre todo ese final abierto que dejas.
ResponderEliminarVa mi me gusta.
Saludos
Pablo