El futuro
La pitonisa a la que acudí para conocer mi futuro tenía fama de ser infalible. Ella me miró con sus ojos negros y ni siquiera tuvo que leerme las cartas del tarot. Me dijo que antes de un año sería hombre muerto. Entonces decidí cambiarme de sexo. Infalible, como digo.
¡Que gran decisión tuvo tu protagonista, Cadiilac!
ResponderEliminarGran micro lleno de ingenio. Me ha gustado mucho.
Un saludo.
Pablo
Me sacó una sonrisa tus palabras. Muy bueno el relato.
ResponderEliminar:) Muy bueno Cadillac Solitario
ResponderEliminarUna sabia decisión con la que evitó males mayores y supo burlar a la muerte. Al menos durante un año...
ResponderEliminarVa mi "Me gusta" y un cordial saludo, Cadillac.
¡Plas, plas, plas! ¡Qué bueno!
ResponderEliminarUn saludo, Cadillac.
Muchas gracias por vuestros comentarios, Pablo, Ricardo, Raquel, José Antonio y Fina. Ya es todo un premio que os guste o que os haya sacado una sonrisa.
ResponderEliminarUna manera muy inteligente de confundir a la muerte, muere un hombre y nace una mujer. Un microrrelato muy bueno, suerte.
ResponderEliminarSaludos.
¡Grandioso! La carcajada es el mejor punto final.
ResponderEliminarMis más sonoros aplausos, Cadillac.
Muchas gracias también a vosotros, Beto y Microrelatate, por leer y comentar. Que os guste sigue siento un premio.
ResponderEliminarSaludos.
Muy bueno Cadillac, una manera muy hábil de esquivar la muerte matando él mismo al hombre. Muy original tu micro, felicidades. Un saludo.
ResponderEliminarGracias también a ti por tu lectura y el comentario, Matrioska.
ResponderEliminarSaludos.
Si hay que cambiar la realidad para que el futuro se modifique, pues se hace, el caso es sobrevivir, aunque siempre le quedará la duda de si la pitonisa era en realidad una farsante y el cambio de sexo fue para nada; en todo caso, tu protagonista ha preferido curarse en salud, ya sólo le quedará acostumbrarse.
ResponderEliminarUn relato muy simpático
Un saludo
O que la pitonisa sea la propia artífice del futuro, dada su infalibilidad. Lo importante, como dices, es sobrevivir.
ResponderEliminarGracias por el comentario, Ángel.
Saludos.