Little Moon

El día que su televisor se convirtió en un agujero negro y empezó a absorberlo todo alrededor no pudo evitar mover, por primera vez en años, sus trescientos quince kilos. Eso que brilla en el cielo es Little John. La Luna nos la cargamos en la Tercera Guerra.
Escrito por Ignacio Urtiaga - Twitter

22 comentarios :

  1. ¡Fabuloso! El apocalipsis en 50 palabras y punto final. Enhorabuena por este gran relato.

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    1. Gracias, Belén. Esto va para los que se acercan tanto a la tele cuando se va la imagen...

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  2. Y así, con apenas dos pinceladas, has sido capaz de dibujar un futuro (¿el futuro?) y una historia (¿la Historia?). ¡Bien hecho, Ignacio!

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    1. Gracias por ver el futuro —a pesar de lo negro negrísimo que lo pinto— y la historia —que igual hay dos o tres, pero son solo bosquejos—.
      Buena vista.
      ¡Nos leemos!

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  3. Lo futurista empieza a correr el riesgo de resultar "presentista" .
    Conciso y provocador, me gusta mucho.

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    1. Gracias Juan. Lo cierto es que estaba planteado en presente, pero a veces resulta más efectivo hacer como que se ve desde lejos para que se vea de cerca.

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  4. Hola Ignacio.
    Micro apocalíptico que viene bien para dar un toque de atención.
    Me gusta.
    Felicidades.
    Un abrazo.

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  5. Excelente relato, Ignacio. Al final la televisión nos traga y nos atrapa. Gran metáfora la de tu relato apocalíptico.
    Muy bueno
    Un abrazo.
    Pablo.

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    1. Gracias por el comentario Pablo, si es que no hay nada como la "caja tonta" para abrir puertas entre dimensiones.
      Un abrazo.

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  6. Espléndida muestra de ciencia ficción pura. El hombre atrofiado y finalmente engullido por su propia creación tecnológica. Muy bueno.
    Saludos.

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    1. Hombre Vicente, gracias por lo de ciencia ficción pura. Para mí es un poco fábula de ciencia ficción. Con moraleja y todo.

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  7. Muy bueno, Ignacio. Un futuro distópico que parece no estar demasiado lejos de la realidad.
    Saludos.

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    1. Gracias Sandra, sois todos buenísimos comentando. Gracias, me alegro de que te guste.

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  8. Una de mis frases es que la televisión deja seco el cerebro ... Ya sabía yo que tarde o temprano el tiempo y 50 palabras me darían la razón.
    Apocalipsis viene... Pónganse todos a salvo.
    Besos.
    Malu.

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  9. Pobre Juanito. Al final vio mundo.
    Un abrazo Mr. Urtiaga.

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  10. ¡Qué futuro más negro e incierto nos espera! Lo mejor: no encender la televisión y ocupar el tiempo libre en leer y, sobre todo, en escribir lo que sea... Bueno, lo que sea, no. Mejor relatos de cincuenta palabras, que la página habrá que seguir manteniéndola en alza.
    Apocalíptico y presumible futuro el que nos presagias, Ignacio. Muy bien narrado. Así que va mi "Me gusta" y mi reconocimiento.
    Un saludo muy cordial (con el mando de la tele en la mano... para apagarla).

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  11. Creo que tu relato es un magnífico guion para una serie de televisión: es pura imagen.
    Y te aseguro que no estoy siendo irónica, sólo pretendo decirte que me gusta, me gusta mucho. Y que de vez en cuando también me gusta tirarme en el sofá y dejarme absorber por una buena historia como la tuya.
    Un saludo, Ignacio

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    1. Gracias, Marga, próximamente: "Moon Book". La estantería que absorbía a quienes no leían libros... No te preocupes que no corres peligro.
      Saludos.
      ¡Nos leemos!

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  12. Sin duda, la televisión es ese agujero negro que absorbe nuestras mentes e idiotiza nuestros actos. Esa luna final, divertidísima. Me ha gustado mucho, Ignacio. Un abrazo.

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  13. No hay mal que por bien no venga. La televisión consiguió, al fin, hacer mover los trescientos quince kilos de Little John. Muy ocurrente tu micro, Ignacio. Un saludo.

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    1. Realmente ese era el "detalle" que me hizo "moverme" para escribir el relato.
      ¡Gracias!

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