Lugares comunes
"Todo en la vida está ya dicho. Habitualmente, lo que hablamos a diario son lugares comunes, verdades repetidas, palabras gastadas, existencias monótonas como la mía".
El distraído ventrílocuo no lo escuchó. Ocupado como estaba, lo extrajo de su maleta, lo calzó en su mano y dio comienzo a la función.
El distraído ventrílocuo no lo escuchó. Ocupado como estaba, lo extrajo de su maleta, lo calzó en su mano y dio comienzo a la función.
Gran micro. ¿Donde reside la magia, en el mago, o en el truco..?
ResponderEliminarUn saludo
Muy sabio ese muñeco y muy bueno este relato.
ResponderEliminarSaludos, Daniel.
A veces, sólo al escucharnos a nosotros mismos tomamos verdadera conciencia de nuestra conducta. Al parecer este muñeco, como alter ego del artista, tiene esa difícil capacidad. Muy buen relato, Daniel.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas veces ocurre que somos como muñecos, que llevamos una vida monótona y que la rutina nos lleva siempre ha hacer lo mismo y a que todo sea tan común ... En nuestra mano está poder cambiarlo o no, depende de la comodidad o incomodidad con la que queramos vivir.
ResponderEliminarMe gusta Daniel, un beso.
Malu.
Hay veces que algo dentro de nosotros sabe que las cosas no van bien, que debemos cambiar, pero estamos tan ocupados y alienados que no somos capaces de escucharnos. Una buena manera de contarlo, Daniel. Un saludo.
ResponderEliminarA pesar del abandono, la soledad se impone y por eso le sigue echando de menos.
ResponderEliminarO al menos eso creo yo.
En cuento al relato es de los que hace subir el listón.
saludos