Gemidos
La espía rusa se acercó, humedeció sus carnosos labios con la lengua, y le dio un beso de tornillo que le hizo emitir obscenos gemidos de placer. Después, acercó la boca hasta su oído y susurró: "Paco, despierta que te ahogas, mañana sin falta te pido hora para el otorrino".
Lo peor de todo es que, para rematar la escena, debió transcurrir en la madrugada de un domingo a un lunes, con lo crudos que ya son ellos de por sí. Ese hombre se habrá despertado con desilusión, pero cuando lo piense bien se dará cuenta de que alguien vela por él, que es mucho
ResponderEliminarUn relato muy simpático, Toni. Un abrazo
¡Muchas gracias Ángel! Tienes razón, seguro que a la espía rusa se la traía al fresco los problemas respiratorios del pobre Paco. :-D ¡Un abrazo!
EliminarMe ha gustado mucho cómo has elaborado este cóctel erótico-laringológico, tocayo. Un relato con mucho sentido del humor conseguido gracias al perfecto manejo del tiempo narrativo.
ResponderEliminarUn relato de los que se aprende.
Un saludo
Hola Antonio, muchas gracias por tu comentario. Aprender aprendo yo todos los días de vosotros, en esta página. ;-) ¡Un abrazo!
EliminarLástima, seguramente lo despertó su inoportuna mujer en lo mejorcito del sueño.
ResponderEliminarMuy simpático relato, Toni, cosa que se agradece de vez en cuando.
Enhorabuena y un saludo.
¡Muchas gracias, Mª Jesús! ¡Un abrazo!
EliminarMe ha encantado. Ese comienzo con suspense amoroso y ese giro final, me ha parecido sublime. Muy bueno.
ResponderEliminarSaludos.
Pablo
¡Gracias Pablo! Me alegro de que te haya gustado. ;-)
Eliminar¡Saludos!
Ese beso de tornillo no fue suficiente para fijarlo bien en su sueño. Quién sabe, quizá el otorrino tenga el destornillador adecuado.
ResponderEliminarMuy simpático, Toni.
Un saludo
¡Gracias, Margarita! Me parece a mí que a Paco, el destornillador del otorrino lo le va a gustar tanto. :-D ¡Un saludo!
EliminarUn sueño cargado de erotismo y una realidad que se carga ese sueño bañado de pasión deslenguada. Divertido 50.
ResponderEliminarun abrazo Toni.
¡Hola Mª Belén! Me alegro de que te haya parecido simpático. ¡Un abrazo! ;-)
EliminarComo bien dice Antonio, un relato para aprender de él, es decir, que está escrito con maestría. Una perfecta muestra de que la trascendencia del tema no es esencial para hacer una magnífica historia. Enhorabuena, Toni. Saludos.
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Enrique! Se agradecen tus palabras. Como le comentaba también a Antonio, el que aprende soy yo todos los días con las 50 palabras de todos vosotros. ¡Un abrazo!
EliminarUna historia llena de humor, con un excelente ritmo y que realza las virtudes del sueño, ja, ja, ja. Me voy a dormir.
ResponderEliminarSaludos, Toni.
¡Gracias, Vicente! Buenas noches, y cuidado con las espías rusas. ;-)
EliminarUna historia muy divertida en la que realizas un giro con gran maestría. Enhorabuena. Un abrazo. Gloria
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Gloria! ;-) ¡Un abrazo!
EliminarComo para confesar que anoche soñé que pegaba un tiro a mi despertador... Si es que puestos a soñar, mejor seguir el ejemplo de tu protagonista y para escribir, tomarte a ti como modelo.
ResponderEliminarUn saludo, Toni.
¡Muchas gracias Fina! Te agradezco mucho tus amables palabras. Por cierto que tu sueño del despertador, todos los lunes por la mañana yo desearía hacerlo realidad. :-D ¡Un abrazo! ;-)
EliminarGenial!!!! Me ha encantado. Me sacó una sonrisa. Abrazos!!!
ResponderEliminarMe alegro mucho de haberlo conseguido, Carmen. ¡Un abrazo!
EliminarToni, me parece que tu protagonista sufre de Apnea del sueño, de ahí que confunda la falta de aire con el beso de tornillo. Lástima que solo era un sueño. Muy buen micro! Enhorabuena. Besos
ResponderEliminar¡Hola PIlar! Apnea del sueño, o.. un sueño demasiado recurrente. :-D ¡Un abrazo!.
EliminarParece ser que mientras la sensual espia rusa lo besaba en sueños, en la realidad su mujer espiaba su sueño y no supo interpretar sus gemidos. Una manera genial de unir ambas escenas de espionaje. Felicidades, Toni. Saludos
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado y gracias por aportar el matiz del doble espionaje.Me encanta. ¡Un abrazo! ;-)
EliminarY los sueños, sueños son ...
ResponderEliminarDivertido relato Toni, un beso.
Malu.
¡Hola, Malu! Así es, afortunadamente, para la mujer de Paco, el soñador.. :-D ¡Un abrazo! ;-)
EliminarLa cruda realidad haciendo de las suyas y tirando por tierra un sueño algo asfixiante, pero placentero. Buen giro final, Toni, felicidades. Un saludo.
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Matrioska! :-) ¡Saludos!
Eliminar