Gusanos paralelos
El hombre observa los tres gusanos alineados sobre el cristal de la mesa.
El primero desaparece, trayendo un placer casi olvidado. El segundo sonríe, retándolo a continuar. El tercero espera su turno, fingiendo inocencia.
Cuando la mesa queda limpia de polvo blanco, reconoce el sabor a muerte en su paladar.
El primero desaparece, trayendo un placer casi olvidado. El segundo sonríe, retándolo a continuar. El tercero espera su turno, fingiendo inocencia.
Cuando la mesa queda limpia de polvo blanco, reconoce el sabor a muerte en su paladar.
Buen relato sobre la extraña relación entre el hombre y sus adicciones, que representas en este caso por gusanos de cocaína dispuestos en lineas paralelas que trazan un camino a ninguna parte.
ResponderEliminarComo magníficamente concluyes, las drogas es uno de lo muchos sabores de la muerte.
Un relato contundente y bien escrito, Asun.
Un abrazo
Muchas gracias por tu comentario, Antonio.
EliminarEs un tema muy duro, y desgraciadamente los que caen en la adición no son del todo conscientes de la carga letal que acompaña a la droga.
Un abrazo.
Perdón por la errata, quise poner adicción.
EliminarMe ha dejado impactada la forma en que nos cuentas esa doble mentira que son las drogas. Su engaño de poder ofrecernos placer y elevarnos, y nuestro autoengaño de que realmente es así aunque nos esté matando. Fantástico, micro, Asun, felicidades. Un beso.
ResponderEliminarPor desgracia el autoengaño al que te refieres se descubre en muchas ocasiones cuando ya es demasiado tarde para salir de ese círculo.
EliminarGracias, Matrioska.
Un beso.
Estupendamente escogida la metáfora de los gusanos aludiendo a una adicción tan especialmente difícil como la del cocainómano.
ResponderEliminarSegún tengo entendido, por otros de tus comentarios, eres médico, lo cual se refleja en la precisión con que tu relato nos ha maravillado, Asun. Felicidades.
Al menos, tu personaje ha detectado el sabor de la muerte en su dependencia, otros ni siquiera logran dar este primer paso.
Un fuerte abrazo.
Vicente
Me alegra que hayas captado mi intención al escoger los gusanos como metáfora de una adicción que va mermando el cerebro de sus víctimas. Como bien dices, la mayoría no es capaz de reconocer lo letal que pueden llegar a ser, y no solo me refiero a la muerte física sino a otra quizá más terrible aún: la muerte social y de las relaciones familiares.
EliminarUn beso.
Todas las adicciones tienen un aspecto placentero al principio, pero finalmente solo sirven para aplacar un poco el dolor producido por su abstinencia. Creo que con la actitud incitadora de tus tres rayitas animadas has plasmado perfectamente el irresistible poder de su atracción. Gusanos, muerte... y el dolor de la frustración tras haber caído una vez más en su red... Creo que no se puede pedir más a un relato tan corto. A mí me parece magnífico, Asun.
ResponderEliminarEnhorabuena y un abrazo.
Totalmente de acuerdo contigo, Enrique. Me resultó muy simbólica esa imagen de los tres gusanos, que consiguen finalmente que el protagonista se arrastre igual que ellos y saboree el amargor de la muerte que destruye poco a poco su cerebro.
EliminarMuchísimas gracias por pasarte y por tus generosos comentarios.
Un beso.
Tres rayas que representan las sensaciones asociadas a las drogas: placer, necesidad de repetir y peligro cierto pero nunca manifiesto. Al final queda un regusto de muerte, el vacío que resulta tras esos fuegos de artificio, la publicidad engañosa disipada, un espejismo que no conduce a ninguna parte.
ResponderEliminarUn relato más que interesante, que lo dice todo sin contarlo de forma explícita.
Un saludo
Gracias; Angel. Como bien dices, quise representar las tres fases clásicas del adicto a las drogas en cada una de esas rayas con aspecto de gusano. Me alegro de haberlo sabido trasmitir, a la vista de vuestros comentarios.
EliminarUn abrazo.
Brutal!!!
ResponderEliminar:D
Gracias, *L*.
EliminarUn abrazo.
Asun que forma tan genial de narrar el mundo de la adicción a una droga, Esa comparación de las lineas de coca con gusanos es única
ResponderEliminarGran relato Asun, me ha gustado mucho. Un beso.
Muchas gracias, Javier. Si, las rayas son como gusanos que se meten por la nariz y van comiéndose poco a poco el cerebro del cocainómano. Terrible adicción.
EliminarUn beso.
Poderosas imágenes las que nos describes y cómo reflejan las diferentes fases del acercamiento a cualquier tipo de adicción. Placer, falsa sensación de dominio y por último pérdida del control.
ResponderEliminarUna narración contundente para un gran relato.
Saludos.
Gracias por comentar, me alegro mucho de que te haya gustado.
EliminarUn abrazo.
Me ha encantado tu relato, Asun. Has descrito a la perfección la sensación de un adicto ante tres rayas blancas de coca (a mí me han recordado esos gusanos a las blancas rayas de coca perfectamente alineadas y agrupadas por una tarjeta de crédito). Tres rayas que son tres fases en la vida del drogadicto.
ResponderEliminarLo has contado a la perfección.
Una genialidad.
Besos.
Pablo.
Javier, Jose y Pablo: me alegra que hayáis captado el simbolismo de esos gusanos que no solo se parecen físicamente a las rayas de coca que va consumiendo nuestro protagonista-víctima, sino que representan las fases de su adicción, que le llevan a caer en lo más profundo de este terrible problema social.
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestros comentarios.
Besos.
En cuanto a análisis, poco puedo añadir a lo que han comentado los compañeros.
ResponderEliminarEn cuanto a las sensaciones que me ha provocado, sobre todo he sentido lástima por el protagonista.
Saludos cordiales, Asun.
La verdad es que es una triste realidad la de las adicciones, y de difícil tratamiento.
EliminarUn abrazo, Notincgas.
¡Impactante! Enhorabuena, Asun.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias por comentar.
EliminarUn beso, Fina.
Atroz e implacable tu relato, Asun.
ResponderEliminar¡Felicidades!
Un abrazo.
Muchas gracias, Mª Jesús.
EliminarUn beso
Una perfecta, y triste, metáfora que ya habéis explicado muy bien, con los gusanos devorando las entrañas antes de "convertirnos en polvo".
ResponderEliminarMuy bueno, Asun.
Un beso
Sí que es triste, esos gusanos son implacables y van directos al cerebro, su manjar favorito.
EliminarUn beso, Margarita.
Sorprendente final. Eso es lo bueno de esto. Me encantó !
ResponderEliminarGracias.
EliminarUn abrazo.
Has contado muy gráficamente, con estas tres secuencias mortíferas, el final de este drogadicto. Tan bueno como triste este relato, Asun. Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias por comentarlo, Juana.
EliminarUn abrazo.
Excepcional relato y metáfora de esa vuelta al infierno. Enhorabuena, Asun. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Salvador.
EliminarUn abrazo.
Genialmente expuesto y escrito. Enhorabuena me ha gustado un montón (no rayas, montón)
ResponderEliminarBesos Asun.
Otro montón de gracias para ti, Isidro.
EliminarUn beso.
Brutal! (ay, que ya lo han dicho)
ResponderEliminarGenial! (ay, que también)
... voy mirando los comentarios y veo que ya lo han dicho todo!!
Impresionante como cuentas la historia sin contarla, como los gusanos representan tanto el foco centrado en el momento como el zoom del proceso, y qué palabras tan bien elegidas ("sabor a muerte"...).
Para aplaudir con las orejas!
Un abrazo Asun.
Carme.
La verdad es que estoy asombrada de que os haya gustado tanto (y halagada, para qué negarlo).
EliminarUn beso, Carme.
Ya el título me encantó y me dio muchas ganas de leerlo. Los dos primeros párrafos me intrigaron y me divirtieron. No supe de qué se trataba hasta la última frase y ahí fue cuando pensé "es genial", y aplaudí.
ResponderEliminar¡Enhorabuena, Asun!
Un beso.
Tú si que eres genial, Sandra. Me alegro mucho de haber conseguido mantener tu interés desde el título hasta el final.
EliminarUn beso.
¡Espléndido, Asun! ¿Para qué añadir nada más? Vuelvo a releer tu micro y decir algo sería para quedarme corto y no rendir suficiente homenaje a tu texto. Así que me quedo con mi espléndido inicial y añado un me gusta porque es así.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Besos.
Vaya, Jose Antonio, que me vas a sacar los colores. ¿Homenaje? Eso es lo que tú te mereces, maestro de maestros. A mí me basta con tu "me gusta", que no es poco.
EliminarUn beso.
Querida Asun, me gusta mucho el micro, pero sobre todo el título, que prácticamente lo dice todo.
ResponderEliminarEl tema de las adicciones es un gran gusano que va mermando a la persona, felicidades, es muy bueno.
Besos.
Malu.
Me alegra que el título te parezca adecuado, Malu. Dudé mucho al ponérselo, la verdad es que siempre dejo para el final el título y normalmente es lo que más trabajo me cuesta decidir.
EliminarUn beso.
"Gusanos Paralelos" bien podría ser una nueva versión del viejo relato de Robert Howard, aunque tu micro es más espeluznante porque es del tipo de horror real y mortal que nos puede atacar en cualquier momento.
ResponderEliminarFelicitaciones Asun, me ha gustado mucho.
Muchas gracias, Jean.
EliminarUn abrazo.
¡¡¡Magistral!!!
ResponderEliminarMe has dejado sin más palabras.
Un abrazo.
Gracias, Rosy.
EliminarUn beso.
En tan sólo 50 palabras encierras la tragedia de una vida. Magistral, Asun. Un abrazo de Gloria
ResponderEliminarGracias, Gloria.
EliminarLo que me gustó de tu micro es la disposición en tres párrafos, como las tres rayas que se mete el protagonista, como tres actos del drama de la droga.
ResponderEliminarFelicidades
Gracias por tu comentario, Miguel Angel.
EliminarUn saludo.
Narras muy bien en tan solo 50 palabras, la vida de esos "gusanos" que se meten en el cerebro, cuando no puedes con tu propia adicción. Muy bueno.
ResponderEliminarGracias, Olga, me alegro de que te haya gustado.
EliminarUn abrazo.
Bueno Asun, es increíble como se te da el micro, me costó pillarlo en serio, ya sé que lo del polvo blanco es muy visual, pero aún así, ahora sí en cuánto lo pillé ya no pude olvidar el sabor a muerte. Es impactante. Deberían usarlo para una campaña contra las drogas. Fiel seguidora tuya. María Cueto
ResponderEliminarMuchas gracias por pasar y comentar, María. Me alegro mucho de que te haya gustado.
EliminarUn beso.
Ahora sí me he dado cuenta, me queda la duda de paralelos...
ResponderEliminarAlgunas veces el jurado deja afuera algún relato al que he marcado como uno de mis favoritos, para estar en el cuadro de seleccionados, pero esta vez el jurado ha coinci-dido conmigo al escoger a uno de los que más me han gustado este mes, el suyo. Me alegra que esté en ese cuadro, espero verle en el palmarés.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias, Beto.
EliminarUn abrazo.