La cafetería
Se encontraba absorto en sus pensamientos, con un café en la mano, hojeando un periódico.
Alzó la vista un momento y la vio entrar en la cafetería. Un sudor frío empezó a recorrer su cuerpo. Sabía que su deuda quedaría saldada a partir de ese momento.
La muerte estaba cerca.
Alzó la vista un momento y la vio entrar en la cafetería. Un sudor frío empezó a recorrer su cuerpo. Sabía que su deuda quedaría saldada a partir de ese momento.
La muerte estaba cerca.
Interesante relato, José Antonio. Da para mucho.
ResponderEliminar¿Es esto una reunión concertada o la muerte concluye una intensa búsqueda? ¿En qué consiste la deuda a que se alude? De hecho, ¿es la muerte quien entra en la cafetería o lo hace una mujer que viene a cobrar venganza?
Estupendo.
Saludos.
José Antonio: me imagino a más de un mafioso sentado en un bar, y la cara al ver a su verdugo dirigirse a él. Esa idea se me ha venido a la cabeza al leer tu estupendo relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pablo
Me gusta... Lo que aparece para cobrar la deuda no... El relato jejeejje. Enhorabuena. Abrazos
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