Demente

Paseaba por la habitación, hambrienta, sin saber dónde estaba ella. Llevaba tres días sin aparecer por la casa. Sentía correr la locura en sus venas. Harta de escuchar sus propios pensamientos, comenzó a maullar en voz alta. Nadie le respondió, ni siquiera esa gata que le miraba desde el espejo.
Escrito por Esther Moreno Morillas - Web

10 comentarios :

  1. ¡Qué bueno, Esther! Porque... ¿estaba loca y se creía gata? O, ¿era gata pero estaba loca? ¿Qué piensas los gatos locos? ¿Piensan los locos que se creen gatos?
    Me voy a reflexionar al tejado.
    Un abrazo.

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  2. Es increíble como las mascotas llegan a ser un miembro más de la familia, con sus incondicionales muestras de cariño, su fidelidad y simpatía. A veces se nos olvida que los dueños tienen la obligación de procurarles las mejores condiciones posibles. Espero que esta gatita recupere la cordura muy pronto.
    Saludos, Esther.

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  3. Me preocupa que la dueña se haya ido de vacaciones y se le haya olvidado o la haya abandonado. Es para volverse loca. Espero que vuelva pronto y no muera de hambre o locura.
    Besos.
    Pablo

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  4. Patricia, Pablo y Vicente, gracias por leer y darme vuestras opiniones.
    Pensé mucho en mi gata cuando escribí este micro. En como se relaciona con el espejo, como si de verdad hubiese otra gata, y en como actúa cuando estoy fuera de casa (según me comentan mis compañeras de piso). No está loca, solo que aún es pequeña y tiene esos momentos de enajenación tan propios.
    Un abrazo :)

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  5. El comportamiento de los animales es de lo más curioso. Algunos sostienen que, en contraste con los perros, que serían más fieles, los mininos son un poco egoístas, que se mueven por el interés, sobre todo para que les den de comer, pero yo estoy convencido de que también echan de menos a sus dueños, que agradecen y precisan cariño, que no acaban de entender que les dejen solos, de ahí la reacción de tu protagonista.
    Un saludo

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  6. Más que demente parece simplemente y llanamente... hambrienta. En cuanto a quien la ha dejado sin comida... demente, no, tampoco, se me ocurren otras cosas.

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  7. Después de leer el lúcido (y lucido) primer comentario, el de Patricia Richmond, ¿qué puedo añadir yo? Pues nada, que me voy con ella al tejado a pensar.
    ¡Bravo, Esther! Va mi me gusta y mi enhorabuena por este relato, con el deseo de que "ella" aparezca pronto, porque hay "alguien" que la necesita.
    Saludos.

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  8. ¡Pobriña! Sola, hambrienta, y en compañía de indeseables que ni contestan. No me extraña que se pasee por la habitación confusa y desorientada. ¿Cuántos de nosotros en esas circunstancias no nos pondríamos a maullar? Un beso, Esther.

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  9. Es que tres días, son muchos días, no me extraña que se volviera loca la pobre gata. Por eso no tengo yo animales en casa, porque no quiero que estén solos.
    El relato me parece original, bien contado y con calidad, enhorabuena.
    Besos.
    Malu.

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  10. Gracias por vuestras opiniones Ángel, Luisa, José Antonio, Matrioska y Malu :)

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