Despertares
Lo dejé dormido, completamente borracho en mitad de la carretera y me marché. De seguro algún caritativo conductor me haría el favor de arrollarlo. Nadie podría culparme.
A medianoche, sentí golpes en la puerta. Me levanté casi dormido. Desperté al oír la estridente bocina de un camión, doblando la curva.
A medianoche, sentí golpes en la puerta. Me levanté casi dormido. Desperté al oír la estridente bocina de un camión, doblando la curva.
He podido oír esa bocina, Miguel. Escalofriante relato. Buenísimo, muchos abrazos.
ResponderEliminarHay deseos de venganza tan fuertes que superan cualquier obstáculo que se les presente.
ResponderEliminarMuy bueno, Miguel.
Saludos.
Vaya susto que se pegó al despertar. Muy agudo, Miguel.
ResponderEliminarUn saludo.
Pablo
Menudo final, Miguel. De susto. Un abrazo. Gloria
ResponderEliminarWOW, creo que esta historia da para una segunda parte. Habrá venganza? Pedirá perdón?
ResponderEliminarBesos.
Malu.
Tal como presentas la cosa parece que esos despertares serán ya los últimos para tu protagonista. Me gusta el aire truculentillo que se respira en tu micro, Miguel. Un saludo.
ResponderEliminarHhmmm... igual si rueda "como una croqueta" por el suelo llega a tiempo de esquivar el camión, y luego....
ResponderEliminarSaludos!
Carme.