Amor patrio
Se le llenaba la boca con la palabra "patria". Su pecho se henchía de emoción ante un desfile militar o al oír el himno. Estallaba de orgullo con las palmaditas de sus superiores. Cuando, lleno de sobres, se le reventaron las costuras, hubo de recurrir a un lejano paraíso fiscal.
Escrito por Carmen Cano - Twitter
Siempre los más patriotas son los que más tienen que callar.
ResponderEliminarCon una mano saludan a la "patria" y con la otra nos roban.
Buen relato.
Saludos.
Ese amor incondicionalde tantos que se dicen patriotas... Buen relato!!! Abrazos
ResponderEliminar“Detrás de un patriota hay siempre un comerciante”. Escribió José Bergamin, y creo que fue demasiado suave en su diagnóstico.
ResponderEliminarVistos los ejemplos pasados y recientes, es para echarse a temblar cuando a alguien con poder se le llena la boca de la palabra patria. El micro da de lleno en la diana.
Personas cómo el protagonista su única patria son el dinero y ellos mismos. Lo peor es que nos roban algo más que el dinero... Buen micro. Enhorabuena. Un abrazo
ResponderEliminarPor desgracia, no es ficción lo que cuentas. La avaricia hace que algunos se olviden de lo que siempre han presumido. Muy bien contado. Saludos
ResponderEliminarDisculpa que te corrija, pero creo que hay una errata en el título: donde dice "amor patrio" debería decir "amor propio".
ResponderEliminarUn saludo
Que buen relato sobre el buen ladrón, lástima que sea solo un relato que describa la realidad tan crudamente. Me gustaría que este relato no hubiera que escribirlo. Pero es genial.
ResponderEliminarHay personas sin ninguna coherencia, capaces de que se les pongan los pelos como escarpias al hablar de patria, mientras que por la parte de atrás usan su poder privilegiado para robar a todos. El problema es que hacen de esta hipocresía su forma de vida, hasta el punto de considerarla algo natural, el premio que merecen por sus supuestos méritos.
ResponderEliminarSaludos
Ay, que tiempos... Todo es pura codicia...
ResponderEliminarSaludos
Está claro que algunos tienen dos patrias: la afectiva y la fiscal...
ResponderEliminarSi es que hasta los más sinvergüenzas tienen un lado entrañable y sensible, algo que en este caso queda demostrado con ese amor incondicional a la tierra que los vio nacer. "Emotivo" relato.
ResponderEliminarEnhorabuena y saludos.
Como dijo el genial Mark Twain, “La nación está dividida, mitad patriotas, mitad traidores, y nadie puede diferenciarlos”. En este caso y, tratándose del vil metal, cualquier ideología o principio pueden cambiarse a placer, como bien explicaba el amigo Groucho. Buen micro. Un saludo.
ResponderEliminarDesde hace tiempo no me fío de los que enarbolan "la patria" ni los que gritan e insultan a los corruptos. Está demostrado que la mayoría de esos, son los menos patriotas y los más corruptos.
ResponderEliminarAdemás creo firmemente, que todos en nuestra medida y en cierto grado, somos corruptos. Y no vale justificarse con que otros "roban más"
Por eso estoy harto de política y políticos.
Que paren el mundo que yo me bajo.
Relato crítico muy de actualidad. Y yo me pregunto: ¿Por qué la llaman "patria" cuando quieren decir "pasta"?
ResponderEliminarVa mi me gusta (el relato), que no la actualidad.
Saludos, anónimo autor (o anónima autora).
La diferencia entre patriotismo y patriotería, entre un discurso y una ética.
ResponderEliminarBuenísimo.
Saludos.
La patria se construye, lástima que muchos no conozcan ese concepto y decidan "guardarse un vuelto" asumiendo que son patriotas.
ResponderEliminarMuy bueno. Saludos grosos!!
Lamentablemente el doble discurso es un ejercicio diario que podemos encontrar a la vuelta de la esquina.
ResponderEliminarGran relato que muestra la miseria en la que estamos inmersos.
Un beso.
Un gran relato por desgracia muy apegado a nuestra realidad.
ResponderEliminarHay algunos a los que la boca se le llena de patriotismo cuando este en realidad sólo es su propio egoísmo el que los mueve.
Un saludo de Gloria
Una sátira irónica y llena de furor.
ResponderEliminarsaludos
Estaría bien que al reventar las costuras (por acumluación de billetes) se les viera una marca por fuera, así no haría falta ni juicio.
ResponderEliminarBuena caricatura.
Saludos!
"Patria vs. Paraíso fiscal"...Sólo es una dicotomía aparente, pues a la hora de la verdad, para la gente como tu protagonista, prima la pasta.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Esta historia me suena, la veo a diario en los informativos. No por eso deja de parecerme buenísima la forma en la que lo has contado. Y para todos esos "patriotas", solo decirles que dejen de coger lo que no es suyo, por favor. Bueno y también por favor, que devuelvan lo que cogieron ...
ResponderEliminarUn beso.
Malu.