Incertidumbre
La duda le corroía. Había intentado averiguarlo mil veces buscando por los rincones. Rebuscó en armarios, escritorios, cajones, anaqueles, altillos, en la chimenea y bajo las camas. Tenía que haber alguna nota que le permitiera resolver la terrible incógnita que le impedía dormir: ¿por qué su padre se había suicidado?
Escrito por Gloria Arcos Lado
Si ya la muerte no es fácil de superar, que alguien la persiga voluntariamente, la alcance y se funda con ella es aún más duro de soportar. Si además ese alguien es cercano y querido, te deja un montón de preguntas sin resolver y un regusto de culpabilidad que... te impide dormir.
ResponderEliminarBien contado.
Un saludo.
¡Los comentarios no tienen por qué ser anónimos! ;-)
EliminarVale, Álex. Con la emoción me he dejado llevar. Me quito la manta de la cabeza, esa con la que me he liado.
EliminarGracias Margarita. Me alegro que te haya gustado.
EliminarEsta es una situación compleja. Y suceda lo que suceda esa pregunta le perseguirá toda la vida. Gracias por tus palabras.
Puede ser una intriga tipo: ¿Y si era un asesinato? ¿Y si alguien no quería que su hijo leyese la nota por alguna razón? Pero me gusta más la idea metafórica, que ha comentado anónimo antes, dónde la nota en realidad es una explicación a la muerte de un padre. Y evidentemente, esa nota es muy difícil de encontrar.
ResponderEliminarMucha suerte con la votación. Buen relato.
Me alegro que te haya gustado Raquel. La verdad es que no he planteado el relato en plan i TRIGA sino desde el punto de vista de un padre que en un arrebato de desesperación opta por la huida hacia delante sin pensar en el dolor que deja. Gracias por comentar
EliminarSeguro que el padre se llevó la nota de suicidio a la tumba. O no se suicidó y perpetró un engaño para escapar.
ResponderEliminarUn saludo.
Pablo.
Es otra manera de huircuando la vida te agobia. Gracias Pablo por tu comentario.
EliminarSi ya es duro la pérdida de un padre, en las circunstancias de un suicidio más, y es lógica esa desesperación por saber un porque.
ResponderEliminarBuen relato, que hace ver esa angustia.
Saludos.
Sí, Javier la desesperación que se debe sentir ante la pérdida de un padre a causa de un suicidio debe ser terrible. Gracias por tus comentarios. Un fuerte abrazo
EliminarDuro y magnífico a la vez!!! Me transmite la ansiedad en esa búsqueda, en esa explicación de un sin sentido.Un abrazo!!!
ResponderEliminarMe encanta quw te haya gustado. Como dices es un texto duro como sin duda exige este tema. Gracias por tus palabras. Besos
EliminarQue angustia la del protagonista. Todos necesitamos respuesta a nuestras preguntas, sobre todo si es conocer algo tan importante como el porqué se ha suicidado tu padre. Si su pérdida ya es dura, más lo es de esta manera. Es algo que nunca se supera. Nos has trasladado su angustia. Enhorabuena. Saludos
ResponderEliminarGracias Pilar. Ha sido ese el sentimiento que he querido transmitir. Me alegro que haya sabido transmitirlo. Un abrazo
EliminarEl dolor de perder a un padre que se suma a la intranquilidad de no conocer los motivos de su suicidio. En una situación como esta es normal que el personaje se suma en la total desesperación se pregunte: ¿Por qué lo hizo? ¿Pensaría en mí? ¿Pude yo haberlo evitado?
ResponderEliminarBuen cincuenta.
Saludos.
Tienes razón, las preguntas que se debe hacer el hijo deben ser terribles, y no le deben dejar descansar. Las dudas sobre si uno ha podido impedirlo y no lo ha hecho deben correerlo por dentro. Un saludo
EliminarCreo que se va a quedar sin saberlo. Si alguien deja una nota despidiéndose supongo que la dejaría bien visible.
ResponderEliminarTiene que ser muy duro el suicidio de un ser querido, el no haberlo podido evitar o intuir, no entenderlo,..
Saludos!
Tienes razón Carmen. Tiene que generar una gran angustia. Esperó que ninguno de nosotros lleguemos nunca a sufrirlo. Gracias por tus comentarios.
EliminarHay situaciones que nos causan desasosiego y para las que no encontramos justificación. Me temo que ninguna explicación podrá hacer entender al protagonista la decisión tomada por su padre.
ResponderEliminarBuen relato. Saludos.
Aunque hubiera encontrado una nota un hijo jamás llegaría a entender que hubiera optado por el suicidio. Siempre pensaría ?Es que no me quería?Gracias por comentar. Un saludo
EliminarLo único positivo que puede obtener tu personaje de esta situación es el beneficio de esa misma duda, aunque mucho me temo que en ese continuo estado de incertidumbre tenderá a imponerse su vertiente negativa.
ResponderEliminarUna desagradable situación la que nos traes, muy bien contada en mi opinión.
Enhorabuena y saludos.
Muchas gracias Enrique. Tienes razón es un tema muy duro en el que mi protagonista sufrirá ante esa incertidumbre de intentar saber el porquéo si pudo hacer algo para evitarlo. Difícilmente llegará a conocer la verdadera razón. Gracias por tus comentarios y recibe un fuerte y cariñoso saludo.
EliminarCuando alguien se suicida siempre queda esa amarga pregunta revoloteando en los corazones. ¿Por qué? Más todavía cuando se trata de alguien tan cercano. Me ha gustado cómo imprimes en el micro esa desesperada búsqueda de respuestas. Un saludo.
ResponderEliminarGracias Matrioska, viniendo de tí es un gran halago. Está claro que mi protagonista se repetirá toda la vida esa pregunta, aunque probablemente jamás halle la respuesta. Un saludo afectuoso.
EliminarUna muerte imprevisible y voluntaria desconcierta a las personas que conocían al fallecido. Dicen que el tiempo todo lo cura, pero esa regla tiene su excepción, que es la que da título a este relato. No conocer el motivo que conduce a algo tan grave y tajante puede llegar a ser un verdadero martirio, una herida que nunca se terminará de cerrar. Toda la culpa es de quien comete este acto, que no deja de ser una cobardía, eso señala la razón, el corazón puede que diga otra cosa.
ResponderEliminarSaludos
Tienes toda la razón Ángel, será una herida siempre abierta que sufrirá toda su vida, y que muy probablemente marcará muchas de sus actitudes. Gracias por comentar. Un fuerte abrazo
EliminarIncertidumbre para tu protagonista, inquietud para el lector. Al menos eso es lo que has suscitado en mí con tus cincuenta palabras.
ResponderEliminarMuy bueno, anónimo. O anónima...
Va mi me gusta.
Muchas gracias, José. Me alegro que te haya removido algo. Eso era lo que pretendía. Un abrazo
EliminarDifícil encontrar respuestas cuando éstas se hallan en el corazón de las personas. Emotivo relato.
ResponderEliminarUn saludo.
Sí costará mucho a quienes le querían poder llegar a entender jamás sus motivos. Muchas gracias
Eliminary un saludo.
Sí, no creó que llegue a encontrar ninguna respuesta. Me alegro que te haya gustado. Un abrazo
Eliminar"...lo corroía", hubiera estado mejor. Buen relato.
ResponderEliminarTienes razón como siempre. Un saludo
EliminarEsa incertidumbre puede hacer crecer un cierto sentimiento de culpa y acrecentar el sufrimiento.
ResponderEliminarEstoy segura de que ese sentimiento perdurará en él para siempre. Gracias por tus palabras. Un abrazo
EliminarNo sabemos qué tipo de relación tuvieron ese padre y ese hijo/a. Tal vez el padre sufrió de enorme soledad, pasando esta situación indavertida para el hijo/a. Puede que todo ese interés motivado por la incertidumbre, hubiera sido mejor haberlo tenido antes. Pero, claro, no lo sabemos. Interesante para la reflexión. Saludos
ResponderEliminarNo lo he planteado. Probablemente sería distante, pero no lo suficiente como para plantearse un suicidio.
EliminarSiempre hay un motivo físico, psíquico o emocional, pero lo que es una certeza es que siempre deja preguntas, dudas y sentimientos de culpa. Muy bueno. Un abrazo.
ResponderEliminarTienes razón Salvador. Me alegro que te haya gustado. Un saludo
EliminarCreo que hay preguntas que nunca serán contestadas y dudas que nunca serán resueltas, quizá en la otra vida, quién sabe...
ResponderEliminarUn beso.
Malu.
Sí, parece que a mi protagonista no le quedará otra opción. Gracias por tu comentario Malú.
ResponderEliminarMe gustó y pienso que es un micro que da para más desarrollo. Aunque cuál no? Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias Miguel. Pero ya sabes que 50 palabras dan para poco más. Gracias por tus elogios. Un abrazo
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