Regresar
Se preparaba para tomar el avión y volver a Buenos Aires luego de años de ausencias. Durante esos años, el recuerdo de él había estado presente siempre.
Ahora Federico debía volver a su ciudad no solo a enfrentar la muerte de su madre sino también a esos fantasmas del pasado.
Ahora Federico debía volver a su ciudad no solo a enfrentar la muerte de su madre sino también a esos fantasmas del pasado.
Nostalgias, problemas no resueltos y la vuelta al pasado, todo ello en 50plabras, buen relato Fausto.
ResponderEliminarSaludos.
A veces se hace dificil el retorno después de años de ausencia, sobre todo si el motivo es la pérdida de su madre y se han dejado fantasmas a los que enfrentarse.
ResponderEliminarLe deseo suerte...
Faltará saber el desenlace.
Un abrazo
Una situación que se da, cuando la vida te ha llevado por otros derroteros.
ResponderEliminarBien narrado, Fausto
Interpretamos y sentimos el regreso a un lugar que hace tiempo que no visitamos como una vuelta al pasado, pero nunca es así. Ese pasado ha quedado dentro de nosotros, seres en continua y a menudo inconsciente evolución. El viaje de tu protagonista parece más una despedida de lo último que quedaba de aquello (su madre) con algún coletazo de negatividades que aún perduran.
ResponderEliminarUn saludo
Y después de leer el pedazo de comentario que te ha dejado Ángel, solo me queda corroborar sus palabras y decirte que me ha gustado el aire de nostalgia que has dado al relato. Parece que para tu protagonista, vuelve con la mirada marchita y la sien plateada a ver el futuro de aquel pasado incierto que dejó atrás.
ResponderEliminarUn abrazo.
La vuelta al pasado a veces se hace muy cuesta arriba. Pero hay que regresar aunque solo sea por despedirse de él, y afrontar el futuro con esperanza.
ResponderEliminarBonito relato. Un beso.
El regreso al pasado descubre dolores que estaban adormecidos. Microrrelato donde la nostalgia es un personaje más.
ResponderEliminarVa mi me gusta, Fausto, y mi reconocimiento por haber condensado en cincuenta palabras una vida de huida y retorno. Buen micro.
Un saludo muy cordial.
Parece que Federico tiene que afrontar, además de la muerte de su madre, su propia aceptación para dejar atrás sus fantasmas. Un saludo, Fausto.
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