Fallida
Ese día sintió que la gargantilla apretaba demasiado, sería la bufanda que estrujaba su cuello o el recuerdo de las manos del que otrora fuese su amante. El que provocó que perdiese a su hijo, quien causó este sentimiento de culpa que la llevó a convertirse en una suicida fallida.
Este cuento es para treinta y cinco palabras. Las quince últimas le restan fuerza. Así y todo me ha encantado la forma que le has dado.
ResponderEliminarPerdona mi análisis.
Un saludo.
Muy buenas observaciones, gracias.
EliminarA lo mejor sin esas 15 últimas palabras no queda claro que la suicida lo sea.
Lo reescribiré.
Hola, Cristopher. A mí en cambio, solo me sobra la última palabra. Sé que le cambia el final radicalmente, pero así lo veo. Has comprimido muy bien una historia terrible en tan pocas palabras. Un beso.
ResponderEliminarGracias María, creo que no lograrlo es peor.
EliminarSeguir como alma en pena en vida.
Osea fue SUICIDA FALLIDA, no logro su intención de suicidarse. que paso después de tal Suicida fallida.??
ResponderEliminarÉsa es una excelente pregunta, Lettys.
Eliminar¿Qué pasó después?
Las circunstancias de una relación toxica le llevaron a intentar suicidarse, por suerte todo quedó en un intento fallido, pero pienso que en su interior aún tiene ese sentimiento de culpa.
ResponderEliminarBuen relato Cristopher.
Un abrazo.
Gracias Javier, no sé si por suerte falló.
EliminarLa pena es peor en vida, supongo.
Abrazo de vuelta.
Muy ocurrente esta historia que nos regalas. Me gusta que expliques con esas sensación de ahogo las circunstancias que la han llevado a tener el cuello en carne viva.
ResponderEliminarEnhorabuena, Christopher. Gran relato y muy bien contado.
Un saludo.
Pablo.
Gracias Pablo, algunas historias son nudos en la garganta queno dejan respirar a sus protagonistas.
EliminarSaludos.
Cristopher, la protagonista vive atormentada por su relación tormentosa con su amante, por la pérdida de un hijo como consecuencia de ella y por su suicidio fallido. Mucha carga para poder soportarlo. La vida no se presenta fácil, más bien horrorosa.
ResponderEliminarBuen relato.
Besos
Una mujer que tras el fracaso de una relación, con un hijo malogrado, considera que su existencia no tiene sentido, hasta el punto de que toda ella puede sintetizarse en el título, una palabra terrible cuando no se sabe superar. Necesitará algún revulsivo para dar un vuelco a su situación.
ResponderEliminarUn saludo
A tu protagonista le oprime algo más que esas manos estranguladoras, y es la culpa, que mucho me temo seguirá persiguiéndola hasta que en una nueva intentona tenga éxito. Me gusta cómo lo has narrado, Cristopher. Un saludo.
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