Pornoadicto
Navegaba por la red mientras sus alumnos hacían el examen. Sumergido en una de las miles de páginas porno que inundan el ciberespacio no reparó en los veinte pares de ojos que le miraban atónitos. Tener conectado el ordenador al proyector de la clase fue el final de su carrera.
Jajaja, genial Encarna. Muy bueno. Me ha gustado.
ResponderEliminarUn beso.
Pablo.
Una crónica muy divertida, Encarna.
ResponderEliminar¿Acaso inspirada en este suceso?
http://www.elperiodico.com/es/noticias/extra/maestro-deja-proyector-puesto-mientras-mira-lenceria-por-internet-4974161
Saludos.
Jajajaa!
ResponderEliminar¡Será borrico! Un aprobado general y pelillos a la mar...
ResponderEliminarMuy bueno, Encarna.
Muy bueno y además puede suceder...
ResponderEliminarJajaja, ¡en algo se tenía que entretener mientras sus alumnos se examinaban! y vete tú a saber si, en su subconsciente, lo que quería era, precisamente, compartir las imágenes... Muy divertido, Encarna. Felicidades.
ResponderEliminarBesos.
Jajaja... Muy bueno. Mis profes leían el periódico y nos miraban de vez en cuando por encima de las gafas. Por supuesto, el periódico lo dejábamos nosotros sobre su mesa antes de empezar el examen. ;)
ResponderEliminarEse descuido le ha costado el trabajo, cachisss... Muy divertido. Un beso
El problema no fue tanto qué hizo sino cuándo. Todo tiene su momento. Después de algo así los alumnos tendrían difícil volver a concentrarse, al menos en ese examen. Quizá hubiera podido alegar que se trataba de una clase de anatomía, pero no se le ocurrió. Me ha recordado esos momentos en los que los políticos dicen algo improcedente ante un micrófono que no está cerrado como ellos creen.
ResponderEliminarUn saludo
¡Vaya pillada...! Genial, Encarna.
ResponderEliminarEncarna que bien describes la situación. Me gusta mucho el tratamiento que le has dado al micro, a pesar de lo apurado del tema, bien es cierto que en la vida todo debe de tener su momento.Aqui te pillo aqui te mato. Abrazos.
ResponderEliminarjajaj, buenísimo Encarna, muy divertido.
ResponderEliminar¡Vaya despiste!
ResponderEliminarPues les hizo clase de sexualidad sin saberlo... (a ver la edad de los alumnos!)
Saludos.
Es bueno. A los alumnos ya no se les olvida jamás.
ResponderEliminarEsto ha sucedido porque, la realidad supera la ficción.
ResponderEliminarUn micro divertido y ameno.
Un saludo
Un suspenso cum laude.
ResponderEliminarUn relato sobresaliente, aunqe enganchado a la red.
Saludos.
¡Ya le vale! Un micro simpático y muy bien contado. Un saludo, Encarna.
ResponderEliminar¡Ay!, el ciberespacio. Ese lugar intangible y traidor que nos trasmite una sensación falsa de seguridad y privacidad, como cuando nos sacamos los mocos en el coche; un acto privado y vergonzante que gozamos con tranquilidad mientras nos está viendo todo el que pasa.
ResponderEliminarMuy simpático y mejor contado, Encarna.
Un saludo.
Encarna muy divertido relato, y creo que a más de uno le ha pasado eso.
ResponderEliminarBuen relato Encarna, me ha gustado.
Besos.
Encarna, un relato con una situación que resulta divertida y que por lo visto ha sucedido en la realidad.
ResponderEliminarMuy bien contado.
Besos
¡Ay, me da la risa... he vivido algo parecido en una clase de inglés...! No era porno pero no era correcto lo que veía el profesor...
ResponderEliminarUn beso.
Malu.