Obstinación
Luego de una prolongada agonía, el forense por fin certificó la muerte del tío Eddy. Pero ya conocíamos su obstinación: durante la velación, salió del ataúd, bastante molesto.
Ya llevamos tres días tratando de convencerlo de que está muerto, pero él solo balbucea incoherencias, mientras su cuerpo se deshace, putrefacto
Ya llevamos tres días tratando de convencerlo de que está muerto, pero él solo balbucea incoherencias, mientras su cuerpo se deshace, putrefacto
Daniel, ya dicen que "genio y figura hasta la sepultura" y por lo visto el tio Eddy es obstinado y no quiere que todo termine.
ResponderEliminarMe ha gustado y me ha resultado divertido a pesar de la situación que nos describes.
Enhorabuena!
Besos
Daniel como dice el dicho "genio y figura hasta la sepultura", el tío Eddy ha sido obstinado hasta después de muerto.
ResponderEliminarBuen relato Daniel,original, me ha gustado.
Un abrazo.
Daniel he coincidido con Pilar en su comentario, pero no había leido, jajajaajaja.
EliminarEl tío Eddy debía ser de los de botella de güisqui diaria y cigarrillo impenitente. Qué buen retrato de la obstinación llevada hasta el paroxismo. Saludos Daniel
ResponderEliminarHay gente que es muy suya, que no se atiene a razones, ni ante circunstancias concluyentes, lo cual no está mal del todo si lleva razón, el problema es cuando el empeño es baldío, como en el caso de tu protagonista.
ResponderEliminarUn abrazo, Daniel
Me parece un relato brillante de una imaginación desbordante y, además, la mar de divertido.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
un abrazo.
Pablo.
Imaginando la situación, me he reido. Tozudo el tío Eddy. Un beso.
ResponderEliminarLa obstinación hasta la muerte y más allá, jajaja. Muy bueno, Daniel. Más de uno tendría que hacer una lectura intelectiva de tu micro...
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenísimo, Daniel.
ResponderEliminarUn abrazo
Hay que convencerlo pronto, no sea que acabe por demostrar que los muertos somos nosotros.
ResponderEliminarMuy bueno, Daniel.
Un saludo.
Existen unos ataúdes denominados "antigeniura" (Contra genio y figura) que son excelentes para la inmobilidad del finado, pues por un sistema de sensores por célula fotoeléctrica, emiten descargas eléctricas que dejan tieso al insolente.
ResponderEliminar(Es mentira, pero me voy ahora mismo a la oficina de patentes)
Buen relato.
Saludos.
Qué bueno, Daniel. Lo has narrado de una forma magnífica, mi enhorabuena. Un beso.
ResponderEliminarUn planteamiento tremendamente original y divertido.
ResponderEliminarEnhorabuena, Daniel.
Un abrazo.