Ejercicios prematrimoniales
Él creyó adivinar su intención. Ella había descubierto su debilidad. Nada sucedió muy a su pesar.
En la siguiente ocasión él debía actuar de forma diferente, pero no se había dado cuenta de que ella ya le había ganado la batalla. Muy a su pesar no había sido ella sola.
En la siguiente ocasión él debía actuar de forma diferente, pero no se había dado cuenta de que ella ya le había ganado la batalla. Muy a su pesar no había sido ella sola.
Me parece que ella ya ha encontrado a otro con el cual realizar los ejercicios prematrimoniales.
ResponderEliminarBuen relato Antonio y felicidades por tu 20 50palabras.
Un abrazo.
Gracias Javier, no sabía que es mi 20 50 palabras. A celebrarlo entonces. Antonio
EliminarAntonio, felicidades por tu vigésimo relato. Hay ocasiones que no se deben dejar perder, porque no se repiten. Así le ha ocurrido al protagonista.
ResponderEliminarBien contado. Un abrazo.
Gracias Carmen por tu comentario y las felicitaciones. Saludos, Antonio.
EliminarAntonio, felices 20 relatos.
ResponderEliminarCuando existe un problema de alcoba y no se resuelve a tiempo suele tener consecuencias imprevistas.
Me parece que los ejercicios prematrimoniales han llegado un poco tarde.
Bien contado, aunque parece un acertijo.
Besos
Problemas, problemas, problemas, como lo de la canción de parole, parole, parole, parole. En la alcoba y en todo, y es que no nos preparamos para afrontar la vida como se debe. Acertaste. Gracias y saludos, Antonio
EliminarHay cosas que no se deben posponer, siempre es mejor probar, aún a riesgo de tropezar, a ver qué pasa, que la vida es corta.
ResponderEliminarUn saludo y felicidades por esos 20 relatos.
No sé cómo os enteráis de que es mi relato número 20 en 50 palabras. Gracias por tu comentario. Saludos, Antonio
EliminarEste chico llega tarde a los ejercicios prematrimoniales, tenía que haber sido un poquito más espabilado.
ResponderEliminarFelicidades por tus veinte relatos.
Un beso.
Malu.
Gracias Malu, nunca es tarde si la dicha es buena. Saludos, Antonio
EliminarHola, soy yo otra vez, la otra cara de la moneda. ¿Qué veo yo en tu relato? Una partida de ajedrez. :))
ResponderEliminarGracias María José. A jugar entonces!.
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