Será una vez...
Encontraron en el desván una enciclopedia sobre el mundo real, con fantásticas ilustraciones que mostraban algunas de sus maravillas y de sus tragedias. El niño que vivía en los cuentos quedó fascinado y rogó al abuelo que le indicara el camino a ese mundo, cansado ya de comer tantas perdices.
Un mundo a la inversa, que demuestra que tanto comer perdices también cansa. No se puede vivir en los sueños y en la dulce fantasía permanentemente, de haber alguien así seguro que añoraría un poco de realidad.
ResponderEliminarMuy bueno, campeón
Un abrazo
En ocasiones es bueno darse un baño de realidad, bajar de las nubes, pisar la tierra y darse cuenta que no todo es colorín colorado. Me encanta el título, ese "será" en lugar del típico "erase".
ResponderEliminarBuen relato, me ha gustado.
Un abrazo.
De todo se cansa uno, tanta felicidad a veces hace desear un poco de realidad.
ResponderEliminarOriginal relato.
Besos
Qué maravilla, Marca. Me ha gustado requetemucho.
ResponderEliminarHace días que no hago reverencias. Aquí va una con sombrero nuevo.
Lo cierto es que para saborear la felicidad -las perdices- es menester conocer la infelicidado sencillamente, la realidad, que está plagada de casi todo.
ResponderEliminarBuen relato Marca
Saludos.
Qué juego más interesante entre la fantasía y la realidad. Me gusta que los personajes de los cuentos sueñen con nuestro mundo.
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo, Marca. Un abrazo.
El anhelo de algunos es la rutina de otros, o lo que es lo mismo: «El jardín del vecino siempre se ve más verde».
ResponderEliminarMuy bueno, Marca.
Saludos.
El caso es no estar nunca contentos con lo que nos toca. Me gusta ese cambio de “realidades” con las que juegas en tu micro. Micros que siempre llevan esa Marca Amarilla de originalidad. Un beso.
ResponderEliminarAunque yo me encuentro en el polo opuesto del protagonista, pues intento vivir una historia de cuento al margen de la obtusa realidad, encuentro original y fresca tu propuesta. Saludos.
ResponderEliminarMe encanta tu cambio de perspectiva y ese futuro en el título.
ResponderEliminarSaludos, Marca
Marca, te llevo siguiendo en varios sitios y siempre me quedo embobado. Escribes como nadie. Soy un fan incondicional tuyo. Siempre aciertas.
ResponderEliminarUn micro genial, de diez.
Enhorabuena.
Pablo.
Creo que ese niño ya no es tan niño y menos cuando empiece a leer los verdaderos finales sin perdices.
ResponderEliminarNivel muy alto, como siempre, en tus micros.
Enhorabuena Marca, un beso.
Malu.
La mejor manera de saber apreciar los momentos felices es en oposición a aquellos no tan felices, algo que le es del todo imposible a ese niño.
ResponderEliminar¡Bravo! Me ha encantado tu relato, Marca.
Un abrazo.
Veo que el protagonista de tu micro pasará de ser un niño de cuento a un niño de mundo. Le deseo que reserve algo de la ilusión y la fantasia acumuladas, serán un buen antídoto para poder desenvolverse en la cruda realidad. Muy imaginativo y bien contado, Marca. Saludos.
ResponderEliminarPosiblemente sea que el reino de la fantasía también deje mucho que desear; al fin y al cabo lo hemos diseñado nosotros, con nuestras inabarcables limitaciones.
ResponderEliminarMuy bueno y origial, Marca.
Un abrazo.
No es de extrañar que el niño haya quedado prendado del mundo real; además de tener un menú mucho más variado, la realidad es la base que sostiene a la fantasía. Desde lo físico se construye la imaginación.
ResponderEliminarUn buen relato levantado en la intersección entre lo físico y la invención.
Un abrazo.
El mundo real tiene cosas maravillosas, en efecto, como cierta comunidad que inventa historias fantásticas de cincuenta palabras. No me extraña que el comedor de predices quiera visitarlo.
ResponderEliminarGenial relato, Marca.
Ahora, en fechas de pre-vacaciones, y con tanto trabajo sobre la mesa, no os puedo contestar a tod@s, ni casi leer ni comentar en vuestros relatos!! Pero MUCHAS GRACIAS por vuestros comentarios!! Me pongo colorao cuando os leo, pues hago lo que puedo por aportar a esta genial comunidad, y vosotros hacéis grandes los relatos.
ResponderEliminarGRACIAS!
Un saludo! ;)