Clase obrera

La hormiga nace, observa y parte galería arriba hacia la superficie. Allí sigue una hilera de congéneres y, de vuelta, carga entre los dientes el alimento que servirá afanosa a la reina.

Pasará sus últimos días contemplando inmóvil cómo las demás hormigas parten con decisión galería arriba, hacia la superficie.
Escrito por Álex Garaizar
Anónimo hasta septiembre

8 comentarios :

  1. Pues no hay diferencia entre la clase obrera sea de hormigas o de personas, trabajas para otro toda tu vida y luego cuando te jubilan te dedicas a ver trabajar a los demás.
    Buen relato amig@, yo casi diría que has escrito una especie de fabula.
    Abrazos.

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  2. Una vida sin aliciente alguno no merece llamarse vida, aunque como en este caso venga marcada por el instinto y no por la voluntad. Saludos y suerte.

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  3. En la fábula de Samaniego quería hacernos creer que es más positivo ser hormiga que cigarra, pero me parece que tiene más alicientes ser diferente a la masa, intentar dejar de ser hormiga.
    Buen micro. Saludos.

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  4. La vida tiene sus ciclos y deben cumplirse, así como también se debe aprender a asimilarlos.
    Excelente alegoría, felicidades.
    Abrazos.

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  5. Me parece que el nombre de "Clase obrera" es tan apropiado para el mundo animal como para los humanos. La diferencia es que los humanos a veces pueden cambiar su destino y las hormigas no.
    Muy buena alegoría.
    Besos

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  6. Aunque ya sea un poco tarde, gracias por vuestros comentarios. Mi intención era reflejar las etapas de educación, edad adulta y jubilación/vejez. La "reina" sería el sistema, e incluso (si nos ponemos filosóficos) todo lo que nos coarta dentro y fuera de nosotros, que por inercia alimentamos.

    No llegué a sentirme muy conforme con el relato, la verdad, pero bueno, lo metemos en el cajón de las analogías pseudo-depresivas sobre la vida humana y listo. ¡Un abrazo a todos!

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    Respuestas
    1. Pese a lo que leí sobre tu timidez, veo que te decidiste a dejar tus relatos. Lo bien que hace sincerarse.

      Beso.

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    2. ¡Recuerda que en su día yo era el único participante! Pero sí, a nivel personal soy de los que necesitan un tiempo para entrar en calor.

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