Curiosidades de la vida
Y cuando creía que había sido condenado a arder en el más cruel de los infiernos por no haberse conformado nunca con lo que la vida le había ido deparando, descubrió que la mujer que le abría las puertas de aquel lugar era el ángel con quien siempre había soñado.
Escrito por Juan Aguilera
A más de uno casi le merecería la pena aguardar toda una vida por semejante recompensa, si es que no se limita a abrirle solo la puerta, claro. Un saludo y suerte.
ResponderEliminarA la persona plenamente inconformista e insatisfecha le toca en suerte encontrarse con la mujer de su vida. Casi parece un poco injusto, ¿no? Me ha gustado la manera de contarlo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo que para algunos es el infierno resulta ser el paraíso para otros.
ResponderEliminarMuy buen relato. Besos.
Yo sabía que la vida, a veces, se nos ríe a carcajadas. Pero lo tuyo es muy fuerte, amigo.
ResponderEliminarY muy bueno.
Al final el ser inconformista tiene su recompensa.
ResponderEliminarBesos
Aunque fuera al final de su vida y en las puertas del infierno ha logrado conformarse,tiene lo que siempre ha deseado.
ResponderEliminar01.3 Buen relato amig@, abrazos.
Más vale tarde que nunca. Yo creo que ya se merecía ser feliz en la otra vida si tan desdichado fue en esta. Por otra parte, si estaba soñando con una mujer que literalmente era un ángel, es lógico encontrarla al otro lado, por aquí no suelen verse. Saludos.
ResponderEliminarQué bien has jugado con el tema del infierno y encontrar justo allí al ángel deseado. Me encanta cómo lo has escrito.
ResponderEliminarSaludos.
Pablo.
Después de todo, este personaje ha sido fiel a su naturaleza hasta el final. Quizás el ángel caído con rostro de mujer quiera recompensar su congruencia.
ResponderEliminarMuy bueno, anónim@.
Saludos.
Parece que el infierno no es tan malo como lo pintan y que no son las llamas precisamente las que hacen que nos suba la temperatura.
ResponderEliminarLa vida te da sorpresas y la muerte te abre puertas, ¡curioso! ;)
Un saludo estival
Pues merece la pena mantenerse fiel a uno mismo. Hasta en el infierno encuentra su recompensa.
ResponderEliminarMuy original. Un saludo.
Me parece sencillamente original. Uno espera encontrar llamas abrasadoras por no haber sido lo que se espera de tí. Muy buena persona, poner la otra mejilla. Sufrir a manos de indeseables.A veces es bueno rebelarse contra todo eso.¿Por qué no vas a ser tú el que tenga la razón?. Y mira, además puede que el infierno para ti sea el cielo que tú buscas, y encuentres en él lo que más te importa. Abrazos.
ResponderEliminarNunca se sabe lo que nos va a deparar la vida (o la muerte).
ResponderEliminarY por lo que parece, hasta en el más allá se pueden esperar sorpresas...
Saludos!
Carme.
Me encanta esa sorpresa final y las palabras con que la cuentas. Nada como un desenlace capaz de estremecer.
ResponderEliminarSaludos.
Puede ser que el Infierno no sea tan malo como lo pintan!. Tú, al menos, has tenido una primera visión positiva con el ángel que siempre habías soñado.
ResponderEliminarSuerte y un saludo
“La vida te da sorpresas”, dice la canción. Y es una de esas verdades de Perogrullo que nunca dejan de cumplirse. Ya puede uno planificar hasta el último detalle un viaje, una aventura, la vida entera, que luego los hechos lo pueden desbaratar todo, en unos casos, como en el del relato en cuestión, para bien, en otros, para mal.
ResponderEliminarPor eso, es mejor seguir nuestro instinto, perseguir nuestros sueños, pues si nos equivocamos n os lo deberemos sólo a nosotros, porque lo malo es equivocarnos por haber hecho caso a los demás, por haber sido débiles antes las presiones sociales o las costumbres.
Así que un aplauso para el protagonista del microcuento por no haberse conformado nunca con lo que la vida le iba deparando, la sorpresa final premia su obstinación y empeño.
Enhorabuena por el relato y un abrazo.