El peso del abandono
Con un aparato de alta precisión pesó su libreta todavía virgen. La fue llenando de relatos de cincuenta palabras, constatando que después de cada uno de ellos el peso aumentaba paulatinamente.
Cuando abandonó la vieja libreta, dejando el último relato en la palabra cuarenta, la pérdida de peso fue notable.
Escrito por Juana Mª Igarreta Egúzquiza - Web
Cuando abandonó la vieja libreta, dejando el último relato en la palabra cuarenta, la pérdida de peso fue notable.
Me encanta esa libreta que se va llenando de relatos de 50 palabras, tendrá tanto un peso físico como de belleza que será más difícil de medir pero que al leer esa libreta se podrá valorar adecuadamente. Y yo aconsejaria que rápidamente acabará ese relato de 40 palabras antes de archivar esa libreta.
ResponderEliminarBuen relato amig@, me ha gustado.
Abrazos.
Todos tenemos nuestra propia libreta de relatos, sea en el formato que sea. Seguro que ese último relato será igual de bueno que los demás, aunque sólo tenga 40 palabras.
ResponderEliminarMuy bueno. Besos.
Con cada relato escrito en la libreta aumenta la confianza al escribir, pero cuando se siente incapaz de terminar el relato, por falta de inspiracion supongo, eso pesa mucho y cuesta volver a escribir...
ResponderEliminarLa pérdida de peso será por el vacío que siente...
Buena forma de explicarlo.
Besos
Estoy de acuerdo con las interpretaciones anteriores, por supuesto, pero voy a añadir la de que el autor o autora se muere en el intento y allá se va él, al éter, cargando con su alma y con sus obras, llevándose ese peso perdido. Un saludo y suerte.
ResponderEliminarEsta libreta se asemeja a una obra de arte inacabada. ¿Qué habrá ocurrido en la mente del autor para dejar inconclusa una labor a la que le había consagrado tanto tiempo? Los motivos me intrigan. La duda pesa tanto como el abandono.
ResponderEliminarMuy buena historia, anónim@.
Felicidades.
¿Cómo puede dejar el último relato sin acabar? Después de deleitarnos con sus 50, no nos puede dejar así.
ResponderEliminarMuy buen micro. Un abrazo.
Espero que ese relato llegue a las cincuenta palabras para seguir leyendo frases como las que completan éste de hoy. Enhorabuena!!!
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