Y tú sin saberlo
Aprendí papiroflexia cuando te conocí y por cada cita contigo un animal nacía entre mis manos y un papel. Un día grulla, después un elefante, en una semana mi zoológico y al mes tenía hábitats naturales para ellos.
A un mes de tu cumpleaños sé que te regalaré: mi museo.
Escrito por Geyna López - Twitter
A un mes de tu cumpleaños sé que te regalaré: mi museo.
Un amor expresado en figuras de papel, pero tal vez en lugar de darle todo el zoológico de golpe, yo le hubiera regalado cada día una, pero como indica el título ella no sabe nada.
ResponderEliminarBuen relato amig@.
Abrazos.
Que mejor regalo se puede ofrecer que el elaborado con cariño por nuestras manos, aunque no todos tenemos esa facilidad con las manualidades, para alegría de los artesanos. Suerte y saludos.
ResponderEliminar¡Qué bonito! Eso es un amor verdadero, de los que sacan lo mejor de nosotros mismos y nos hacen capaces de crear mundos. ¡Bravo!
ResponderEliminarSeguro que no podrá imaginarse un regalo tan especial, tan personal y hecho con tanto amor. Un abrazo
ResponderEliminarEspero que no se apabulle, es un regalo muy especial y... también... muy numeroso. Suerte!!
ResponderEliminarMe inspira mucha ternura, este micro. La papiroflexia siempre me ha llamado la atención (verla ejecutar, puesto que yo no tengo la habilidad y destreza necesarias).
ResponderEliminarFelicidades. Saludos.
Muy bonito tu micro. Un regalo precioso de cumpleaños. Besos.
ResponderEliminarMe ha venido a la mente una pareja formada por una mujer oriental y un hombre occidental o viceversa. El origami como símbolo de entrega me ha parecido un gran acierto.
ResponderEliminarFelicidades, anónim@. Te ha quedado requetebién.
Saludos.
No sé por qué, he visto a una madre adoptiva con su futuro hijo.
ResponderEliminarUn beso.
Malu.