Trampa
"Érase una vez" son tres palabras y "éraseunavez", solo una, de igual forma que "érase que se era" son cuatro y "érasequeseera", una. Son vocablos incorrectos, pero no en contexto del cuento que presentó a ese concurso de relatos de cincuenta palabras, para el que no se le ocurría nada.
Tienes razón Crispin en ocasiones frente al papel cuesta escribir aunque solo sean 50 palabras, pero...
ResponderEliminartambiénesposiblehacerenunasolapalabrauncomentariopara50palabrasynoestrampa.
Buen micro Crispin
Un abrazo
El papel en blanco (la pantalla vacía) es un reto ante las más diversas limitaciones: el número de palabras, la ortografía, las cacofonías, nuestra imaginación e inspiración y nuestra actitud y aptitud.
EliminarCuando el papel (o la pantalla) están llenos de palabras, de nosotros, la satisfacción es inmensa, a veces mayor que el resultado.
Gracias por tu comentario.
Parece que te refieres a la libertad creativa de los microrrelatos de cincuenta palabras o a la extrema brevedad de los mismos (o las dos cosas). Curioso tu micro, Crispin.
ResponderEliminarFelicidades. Un abrazo.
Libertad creativa, inspiración, brevedad u otras limitaciones, y la desesperante realidad de que casi todos los relatos me salen con cuarenta y nueve o cincuenta y una palabras.
ResponderEliminarLa limitación de las 50 palabras exactas nos cuesta a más de uno alguna que otra gota de sudor, y no solo en verano. Pero tú has sabido contarlas con exactitud gracias a la licencia poética y a tu ingenio.
ResponderEliminarBuen micro, Crispín. Un abrazo.
Gracias, Carmen. Con mi prupuesta se pueden reducirrelatos de diez, cien o mil palabras a una sola, per, eso sí, mientras se prescinda de más espacios y signos ortográficos, el escritor querrá decir lo mismo, pero el lector entenderá cada vez menos.
EliminarTrampas al solitario...
ResponderEliminarMi cuento o es una trapa, es una historia, el relato de una trampa
EliminarVerdaderamente simpático tu relato. Pero, por favor, no nos metas esas buenas, o malas, ideas en el magín, que luego la liamos. Muy bueno. Suerte y saludos.
ResponderEliminarSí, no vaya a ser que quieran resumir El Quijote a una sola palabra, para ahorrar costes. Aunque hoy, la verdad es que tendencia es la contraria, un libro de menos de seiscientas páginas parece que tiene menos interés (ventas).
EliminarYo, si lo dice Crispín, me lo creo. ¡Marchando un relato completo y con fundamento!
ResponderEliminarTe agradazco u fe en mí a pesar de lo poco legal del relato.
EliminarFo. Crispín, el fullero.
Érase una vez un cuento que, pese a avisar desde el título de su particular naturaleza, fue leído por muchas personas, que quedaron inevitablemente presas de aquella añagaza. Nada se le pudo reprochar al autor, él alegó que ya lo había avisado desde el principio y era muy cierto.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias por tan profesinal defensa. El que avisa no es traidor.
EliminarCrispín, a veces el cumplimiento dr las normas hacen que agudicemos el ingenio, como en el caso de tu tramposo relato.
ResponderEliminarBuen intento... esta vez te ha funcionado.
Besos
Siempre es más fácil empezar una empresa si tienes objetivos claros a la vista.
ResponderEliminarPues en esta trampa sí que hemos caído gustosos. Je, je, je.
ResponderEliminarLa imaginación tiene mucho de engañifa y a ti te sobran los recursos.
Un abrazo, Crispín.
Gracias, Vicente, lo cierto es que la trampa ha servido, pero es poco sutil, todos oa habéis dado cuenta.
EliminarCrispín, Crispín que te has colao. Has dejao la trampilla abierta y nos has pillao los dedos y has conseguido entrar a concurso. Desenfadao y salao. Suerte.
ResponderEliminarBueno, la trampilla no es solo mía. Ejemplos: adonde - a donde, bajo relieve - bajorrelieve, entretanto - entre tanto... Es broma, la vedad es que me he pasado, pero, como bien dices, "ha colao"
EliminarHasta para hacer trampas hay que valer, y tú lo has hecho con humor e ingenio. Un saludo, Crispín.
ResponderEliminarTe agradaezco tu comentario. En cualquier caso muy sutil no he sido, todos os habéis dado cuenta de la trampa, y mira que he intentado que no se note.
ResponderEliminarUn relato que cuenta lo que no somos capaces de contar cuando el cuento no encuentra un camino para ser contado.
ResponderEliminarMe encanta tu original proposición.
Un abrazo, Crispín.
Pablo.
Gracias Pablo.
EliminarAlgún día lo comentaremos en la plaza. Acabo de descubrir que somos vecinos.
Muy ingenioso ¿Y, por qué no?, también reflexivo, tu texto, no texto.
ResponderEliminarSuerte y un abrazo, Crispín
Gracias, María Jesús.
EliminarTanto habéis escrito que estaba preparando la edición del Quijote en una sola palabra, pero finalmente he desistido.
ResponderEliminarEs evidente que cuando hay ingenio e imaginación siempre salen cosas buenas, por más que las musas no aparezcan.
Estupendo, Crispín.
Un abrazo.
Gracia Enrique.
EliminarEl día rn que escribí este cuento las musas estaban, como otros muchos días, de paseo por el extrarradio, y a mí me salió esta rabia en forma de relato.
Un abrazo.
Ja, ja, ja... mira que lo habías avisado en el título... Pero hemos picado.
ResponderEliminarIngenioso, Crispín.
Besos.
Malu.
Gracias, Malu.
EliminarParece que la trampa, aunque evidente, funciona. De hecho, entró en "Cincuenta Palabras".