Transformación
La miró y aún conservaba sus ojos de rata. Estaba humanizada pero no se veía la menor intención de comportarse como humana.
Se le acercó y con su tosca boca murmuró algo, no soportó su aliento.
Al alejarse despacio de ella, descubrió una cola de lagarto, estaba mudando de especie.
Se le acercó y con su tosca boca murmuró algo, no soportó su aliento.
Al alejarse despacio de ella, descubrió una cola de lagarto, estaba mudando de especie.
Transformación, mutación, cambiar para sobrevivir, como la vida misma, en ocasiones te tienes que transformar para salir adelante, solo falta que los demás acepten el cambio.
ResponderEliminarBuen micro Diani, abrazos.
Gracias Javier, como tu dices a veces los demás son quienes más temen al cambio que quien lo vive.
EliminarTu texto me trae a la mente, no se el porqué, a la serie "V". Veo varias posibles interpretaciones, pues no me queda claro si se transforma ella, el-la protagonista o los dos. Lo que sí tengo claro es que me gusta mucho. Suerte y saludos.
ResponderEliminarQuizás todos nos transformamos en alguna medida, pero que a vedes quedan rezagos. Gracias Jesús
EliminarDiani, menuda transformación! Cada vez más alejada de ser humana.
ResponderEliminarEnigmático relato.
Besos
Lo que me he estado preguntando es en que terminará transformándose esta protagonista, pues ni bien acaba de ser rata ya empieza a ser un lagarto.
EliminarGracias Pilar!
De roedor a humano y luego a reptil, ya veremos en qué se queda, quizá con un poco de todo, transformándose en una especie nueva y completa, con lo mejor de cada uno para adaptarse al medio. Parece que no habrá que esperar mucho, pues esta criatura no precisa, como los demás, años de evolución para formarse.
ResponderEliminarUn saludo, Diani
Gracias por tu comentario Ángel, no habrá que esperar mucho para ver esa especie nueva. Con este mundo tan acelerado quizás aparece cuando menos lo esperemos
EliminarMe encanta tu original y valiente propuesta «evolutiva», Diani.
ResponderEliminarFelicitaciones.
Vicente
Muchas gracias Vicente, esta evolución me produce cierto temor, porque esta especie parece carecer de palabras.
EliminarMe da por mal pensar y creer que la transformación de humana en rata, no le llevó demasiado tiempo, pues creo que ese fétido aliento es algo común al alma de ambas especies (según veo y aprecio cómo actúa la especie en general). Lo de lagarto ya no lo tengo tan claro, pues les tengo simpatía; lo que sí es que nos planteas una cuestión nada menor con tu micro. Saludos.
ResponderEliminarGracias Manuel, resulta embarazosa esta transformación, aunque a veces parece que no estamos muy lejos de ella.
EliminarParece que no basta con una primera transformación en rata, que tiene que pasar a ser, despues, lagarto. Curioso micro, Diani. Ofrece varias interpretaciones y eso lo hace más interesante.
ResponderEliminarFelicidades. Un abrazo.
Nadie está conforme con nada, mejor transformarse hasta que la forma que se adquiera sea de provecho. Un abrazo Maria José
EliminarTodos mutamos y a veces, parece que nos deshumanizamos. No somos ni buenos, ni malos sino ambas cosas. Héroes y villanos dependiendo de la ocasión. Si tu relato fuera por ahí, realmente es muy interesante esa visión camaleonica "mutante", esa despetsonificacion en una especie de animalario caleidoscopico.
ResponderEliminarUn saludo,
Me parece interesante tu comentario,ya que los animales no son buenos ni malos porque su nivel de pensamiento no los pone en ese lugar. Entonces que mejor ser una rata o un lagarto cuyas acciones no son juzgadas como Buenas o malas sino como simples acciones.
ResponderEliminarGracias Raquel
Renovarse o morir, esa es mi lectura.
ResponderEliminarUn beso Diani.
Malu.