Alucinaciones
Una angustia brutal y siniestra se apoderó de su mente en estado de alucinación. "¿Habré soñado con él?", pensó mientras se quitaba las babas del cuerpo.
Se levantó como impulsada por un rayo y fue hacia el espejo. La sangre brotaba de su cuello mientras sus ojos se encendían extenuados.
Se levantó como impulsada por un rayo y fue hacia el espejo. La sangre brotaba de su cuello mientras sus ojos se encendían extenuados.
Relato brutal, como la angustia que transmite. Juegas a envolver al lector en esas alucinaciones del título para teminar de leer preguntándome si realmente el espejo devuelve la imagen física o la psíquica.
ResponderEliminarO eso me ha parecido a mí, que soy un poco bruta y gótica.
Me ha gustado mucho, Lucía. Bienvenida.
Muchas gracias, Patricia. Es un gusto viniendo de alguien tan entendido como vos (soy argentina ¿se nota?).
EliminarEn realidad, todos los concursantes tienen un nivelazo. Me sorprendió este sitio y me sentí cómoda de inmediato.
El relato un poco gótico sí que es.
Saluditos.
Bienvenida a 50palabras Lu, aunque ya te he visto comentar algunos relatos. Nos presentas una protagonista que vive alucinaciones, y pienso como Patricia, ya que en tu imagen final no sé si son imagenes reales o fruto de la alucinación, nos dejas un final alucinante.
ResponderEliminarBuen relato Lu.
Abrazos.
Gracias por tu devolución (en Buenos Aires así llamamos a las respuestas de los escritores en relación con un texto propio).
EliminarNo es nada nuevo si digo que es el lector quien completa el relato. Julio Cortázar en Rayuela hacía una distinción (en los años 60 no sonaba misógina) entre lector hembra y lector macho y se refería justamente a quien lee literalmente y quien deja volar su imaginación y termina de escribir el relato. Eso sí, ahora no recuerdo quien era quien.
La fricción que producen realidad y alucinación en el micro activa la fusión desencadenante de un final intenso. Un estreno fantástico en todos los órdenes, Lucía. Mi bienvenida a cincuenta, aunque ¿estoy alucinando o te he visto antes por esta página?
ResponderEliminarMuchas gracias. Considero que quienes participan activamente de la página son todos maestros del arte del relato breve (micro-relato o microficción como también se lo conoce).
EliminarNo pensé que fuera tan arduo meter las ideas en 50 palabras y el desafío me encantó.
Si, me has visto por aquí -ando mucho por las redes de poesía, relatos y cuentos en blogs- y soy una comentarista serial (y cereal).
Lu
Una alucinación con esas consecuencias debe tener algo de real. Ya sabemos que debemos tener cuidado con los sueños, porque pueden cumplirse.
ResponderEliminarUn saludo y bienvenida
Muy perceptivo, Ángel.
Eliminar¿Recuerdas ese famoso dístico de Werther:
“Somos nuestros propios demonios,
nos expulsamos de nuestro paraíso”
Pues, eso.
Un buen microrrelato gótico para una tarde de otoño.
ResponderEliminarMe gustó.
Pablo.
Sonrisa y guiño.
EliminarLu
Potente y turbador, lleno de fuerza. El retrato de esos instantes intermedios entre lo onírico y lo real se impregna al principio, pero rápidamente se desprende del espejo para espesar el miedo.
ResponderEliminarMuy buen estreno, Lucía. Enhorabuena.
Un saludo
Me siento agradecida por el recibimiento y la buena acogida de mi micro en cincuenta palabras. Es el segundo que escribo. Mi primer intento fue en realidad no fue un cuento propiamente dicho, sino unas reflexiones que -buenas o malas- no cumplieron los requisitos que nos pide Álex.
EliminarYa estoy palpitando el del mes siguiente. Es adictivo.
Pues no parece que lo haya soñado, tal es la aparente realidad de la imagen que cree reconocer. ¿O sí? Espero, yo, no soñar con lo que nos cuentas y no despertar, así, en medio de la noche, sin aliento y fluyendo, de mi cuerpo, lentamente mis humores y la vida. Muy bueno, saludos.
ResponderEliminarJajaja. Jesús, me has hecho reír.
EliminarTe diré algo profético: algún día te sucederá algo similar y recordarás a la alucinada protagonista de mi cuento. A todos nos pasa alguna vez.
Lu, bienvenida a la familia, aunque hoy te estrenas, he leído tus comentarios.
ResponderEliminarNos dejas un micro en el que nos queda la duda de lo que es realidad o si todo es una alucinación...
Buen estreno.
Besos
Gracias, Pilar.
EliminarLeo cuentos y comentarios (a veces en un solo día me empacho de ellos y otras los voy leyendo de a poco) y siempre aprendo algo nuevo de Uds.
Nos seguimos leyendo.
Lu
La lectura de tu micro, Lu, me ha traído a la mente la película: El cisne negro. La protagonista tenía unas alucinaciones tremendas y la sangre aparecía y desaparecía, según predominase la locura o la lucidez. ¡Te felicito!
ResponderEliminarUn abrazo.
Para decirte la verdad: nunca vi la película El cisne negro. En cambio, pensé más en vampiros y alucinaciones subjetivas que nos hacen ver la delgada línea divisoria entre realidad y ficción.
EliminarEnhorabuena, si te ha gustado.
Lu
Muchas gracias a todos y cada uno de quienes se han tomado el trabajo de leer, comentar y sobre todo, darme la bienvenida.
ResponderEliminarNo podrán creer la ilusión con la que esperaba el 9 de octubre a las 17 hs (no tuve en cuenta la diferencia horaria).
Son los pares quienes mejor pueden hacer exégesis de un texto. No me molestan las críticas, sino al contrario. Agradezco la sinceridad de quien marca el error. La literatura narrativa, a diferencia de la poesía -que es el género en el que me siento más cómoda- luce mejor en equipo.
Gracias Álex por tu generosidad.
Lu
¡Gracias a ti por participar con este entusiasmo! Ya siento el tema del primer envío rechazado, aunque por aquí la mitad tranquilamente ha pasado por lo mismo...
EliminarEl horario lo doy con el GMT precisamente por la diferencia horaria, así desde Canarias hasta California nadie se siente discriminado ;-)
Siento que cuando hay jóvenes como vos (o tú) que están buceando en las palabras para darle sentido a la literatura y a la comunicación humana y como Ignacio que hace un trabajo artístico notable la supervivencia de la humanidad está asegurada.
EliminarEnvié un nuevo cuento al contacto. Como estoy apenas aprendiendo las reglas si no va, no pasa nada. Me lo dices e intento con otro.
Gracias por la aclaración horaria. Me pierdo igual con el GMT. No es un tipo de referencia que utilicemos en Argentina.
¿Para compartir el cuento en nuestras redes y páginas hay que esperar el final del concurso o una vez publicado ya se puede?
Bienvenida Lu, escalofriante tu relato. Enhorabuena por tan buen inicio, espero disfrutar de tus letras cada mes. Abrazos
ResponderEliminarTe agradezco mucho tu bienvenida y tu comentario.
EliminarGracias por la calidez.
Lu
Lu, bienvenida a esta familia. Te has estrenado con un micro fantástico, en que se unen realidad y ficción.
ResponderEliminarMuy bueno. Un abrazo.
Hei, gracias.
EliminarLa familia cincuentera es de un gran corazón.
Ahora soy yo quien alucina.
Abrazo
Lu
Ay, ay, ay, esas babas cubriendo su cuerpo y sus ojos encendidos contemplando la sangre brotando, presumo, de un par de agujeros de su cuello… ¡Qué mal rollo! Un micro para alucinar, Lucía. Felicidades y bienvenida. Un beso.
ResponderEliminarjajaja. Gracias Matrioska. Anduve merodeando por tu blog y vi que compartes ahí los micros que escribes con maestría en esta página.
EliminarMuy bueno. Gracias.
Lu
Bienvenida, Lu. Muy bueno tu relato, me alegro mucho de que te sientas cómoda aquí, espero leerte pronto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Asun.
EliminarIgualmente.