Genio y figura
Era muy mendaz. Ya cuando era un joven púbero sus tejemanejes consistían en perturbar, cuanto más, mejor, a sus compañeros de juegos con relatos inventados.
Por eso, cuando leí la lápida, no pude reprimir una media sonrisa. Decía así:
Disfrutad, amigos, mi ausencia, que espero sea corta. Nos vemos pronto.
Por eso, cuando leí la lápida, no pude reprimir una media sonrisa. Decía así:
Disfrutad, amigos, mi ausencia, que espero sea corta. Nos vemos pronto.
Hay personas hechas para las historias, para asimilar las de otros y crear las propias. Hacer de ello una constante vital, además de añadir una dosis de humor en el momento más triste, dice mucho de tu personaje. De alguna manera podría ser un ejemplo para muchos de los que enredamos con las letras. Si un relato perturba ya ha logrado algo. Si provoca una sonrisa, más aún. Buen título y buen epitafio.
ResponderEliminarUn abrazo Rafael
Ya lo decía el refrán, "genio y figura hasta la sepultura". Desde luego, murió y pasó al otro mundo de la misma forma que vivió. Persona coherente de principio a fin, desde luego.
ResponderEliminarHumor y buenas letras concentradas en tu cincuenta.
Enhorabuena, Rafa. Un beso.
Malu.
Me encanta comprobar que el protagonista de tu obra no tenia paciencia, por mi puede seguir esperando, pero tu sigue escribiendo sin pensar en lápidas salvo que te cierrren el relato tan bien como este.
ResponderEliminarun abrazo de los dos.
Buen perfil le has sacado al dicho para sentar un precedente fidedigno de esta fiebre de lo breve, que por lo que se ve, puede llevarse uno consigo a la tumba.
ResponderEliminarPatenta la idea, Rafael. Saludos.
Un nanorelato en una lápida, genial.
ResponderEliminarSaludos, Rafael.
Vaya forma sutil de desear la muerte de todo el mundo. Ingenioso. Un buen epitafio, digo, micro. Saludos, Rafael
ResponderEliminarJajaja Me encanta. Estoy por pedirte el epitafio prestado.
ResponderEliminarUn saludo Rafael.
Hasta en la sepultura. Suerte Ángel. Saludos de Antonio Ortuño
ResponderEliminarConfieso que he aprendido una nueva palabra "mendaz".
ResponderEliminarTu mentiroso muertito, me ha divertido con su ingenioso epitafio. La paradoja es que es una autentica verdad.
Suerte y saludos virtuales, Rafael
Agradecido, como siempre, por vuestros amables comentarios...
ResponderEliminarEl mundo de las frases lapidarias (en el sentido estricto del término) es entretenido...Creo que es una buena forma de que te recuerden, más allá de tus virtudes o defectos en vida...
Un abrazo generalizado...
¡Mentiroso y certero!
ResponderEliminarNadie se queda aquí je,je,je...
Ironía e ingenio tu cincuenta nos descubre.
suerte
Besicos
Gracias Carmen...
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