El largo camino del olvido
La estoy olvidando. No sé si fue hace dos años, ocho meses, veintitrés días, nueve horas, doce minutos y treinta y tres segundos, o si fue hace dos años, ocho meses, veintitrés días, doce minutos y treinta y cuatro segundos que ella me abandonó. Como verán, ya la estoy olvidando.
Hola, Rubén. Es difícil difícil olvidar; un proceso que, a veces, requiere años. En otras ocasiones si llega a nuestra vida la luz, el color, la alegría, a través de otra persona que nos vuelva a hacer sentir, asunto resuelto. La mancha de mora...
ResponderEliminarMe ha gustado mucho. Un abrazo.
Precioso y conmovedor, Rubén.
ResponderEliminarYo no voy a olvidar este relato.
Saludos vacacionales.
Rubén, tiene miga tu relato.
EliminarCreo que si lleva mucho tiempo olvidar es que durante todo ese tiempo olvidar, no se ha olvidado.
Más bien se ha ido recordando en el "olvido". Y tanto más se ha recordado cuanto mejor uno se engañe creyendo que ha olvidado o está a punto de conseguirlo...
Muy sugerente, me gusta.
Saludos!
Muchas gracias a María José, Patricia y Carmelo por sus palabras. ¡Un abrazo a todos ustedes! ¡O a todos vosotros, si lo queréis, en español!
ResponderEliminarRubén, desde el momento en que uno pierde la cuenta de la ausencia del que ama, comienza el camino del olvido.
ResponderEliminarBuen relato.
Besos.
El protagonista de tu micro, Rubén, tenía que seguir el consejo del Arcipreste de Hita: Por lo perdido no estés mano en mejilla.
ResponderEliminarUn buen micro. Saludos
Cincuenta tan ajustado a tiempo no he leído antes, ¿o serán cincuenta y una?
ResponderEliminarPreciso y precioso. Saludos, Rubén.
Gracias Pilar, Plácido y Manuel. Un abrazo a todos vosotros.
ResponderEliminarBuen relato en progresion aritmetica. Buen ritmo.
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