Nada mejor
Terminó de cenar y salió a la calle en bicicleta porque no tenía nada mejor que hacer. La dejó aparcada mientras rayaba y rompía retrovisores de algunos coches. Cuando se cansó tuvo que volver caminando porque alguien sin nada mejor que hacer le había robado las ruedas y el sillín.
Pues desperté y no tenia nada mejor que hacer que leer este micro.
ResponderEliminarNada mejor que probar la propia medicina... y cuanto antes mejor.
ResponderEliminarMuy bueno, Ana Belén.
Sin duda, el karma en ocasiones actúa rápido.
ResponderEliminarPara la próxima, se lo piensa... Si en la vida real fuera siempre así, estupendo. Y es que, al final, se recibe lo que se da. Muy buen micro, Ana. Un beso.
ResponderEliminarComo una espiral que se muerde la cola, el micro crea una sensación curiosa de alguien atrapado en su propio torbellino. Para reflexionar. Saludos, Ana Belén.
ResponderEliminarUn micro de los llamados con arco.
ResponderEliminarEmpieza y termina de la misma forma.
Surte
Y, cuando llegó a casa, advirtió que estaba okupada. Quien siembra, cosecha.
ResponderEliminarBuen micro. Saludos, Ana Belén
Como si las cosas fuesen así, yo te doy, tú me das, y sin mayores problemas. Hay gente que es un poco así, y este micro habla de ellos a la perfección.
ResponderEliminarSaludos