Crimen y castigo
No es fácil ser una persona de bien y mantener la calma. Nunca soporté al vecino que aterrorizaba a su mujer, al depravado que acosaba a los niños ni a la cuidadora que zarandeaba al desvalido anciano. Y ahora, este despiadado carcelero al que parece que le debo la vida.
MªJesús, tu protagonista tiene muy buen fondo, quiere ayudar a todo el mundo, pero tal vez las formas es lo que no ha aplicado correctamente y así ha acabado en la cárcel.
ResponderEliminarOjo con el carcelero, que creo que van a saltar chispas.
El título muy acertado
Muy buen relato, MªJesús.
Besos.
Pues sí que parece tener interés como puede acabar este asunto. Lástima, o no, que tengamos que ser los lectores los que nos lo imaginemos. Me ha gustado, María Jesús. Un saludo y suerte.
ResponderEliminarEl título tan Dostoyevski y el relato tan impactante. Una buena persona que yerra el método para llevar bondad y justicia a un mundo de iniquidad. Felicidades Mª Jesús.
ResponderEliminarParece que no eligió la mejor manera de acabar con las situaciones que no soportaba. Ahora toca pagar. Buen micro.
ResponderEliminarParece ser que el protagonista decidió tomarse la justicia con su mano y convertirse, inconscientemente, en un "matón" más, -de esos que él mismo criticaba-.
ResponderEliminarQuizá, este hecho le ayude a entender que ha seguido la misma pauta de comportamiento que aquellos a los que deseaba lo peor.
Un micro que invita a la denuncia de muchas injusticias sociales. Felicidades, María Jesús.
Besos.
Quizás mi lectura sea extraña, pero yo interpreto, en tu relato, María Jesús, que el "carcelero" bien podría ser un marido posesivo, al que la protagonista se siente sometida, y, aunque ella es capaz de ver el dolor en los demás, no sabe atajarlo en sí misma. Disculpa si me he ido por los cerros de Úbeda...
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues más bien va la cosa por donde indican los comentarios anteriores, María José. Ella se tomó la venganza por su mano y pagó las consecuencias. Encerrada en prisión nos relata su situación tras hacer justicia a su manera. Quedas disculpada, faltaría más. Tu aportación es de agradecer además de ser tan respetable como cualquier otra.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cierto, sería una persona de bien pero no supo mantener la calma. Se dejó llevar por su espíritu justiciero... Quien corre peligro ahora es el carcelero. Muy acertado el título, María Jesús. Me ha gustado esa ironía con la que está contado.
ResponderEliminarFelices vacaciones y un beso.
Hola, María Jesús. Un relato estupendo, con la venganza y el afán de hacer justicia como principal protagonista. Esta persona no ha podido con tanta maldad y se ha rebelado; lo que pasa es que le ha salido el tiro por la culata. Ha caido en lo mismo que los demás cometiendo un acto delictivo. Y ahora paga las consecuencias, con el cumplimiento de una condena.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, María Jesús. Excelente argumento y puesta en escena.
Besitos y a descansar.
Parece que tiene un caracter muy vivo, tu prota, que se mete en líos sobre todo si hay una excusa. Puede que con el carcelero lo tenga más dificil pero... es una cuestión de tiempo
ResponderEliminarMuy bueno, tocaya. Lo que está de estar, hasta el carcelero final.
ResponderEliminarBesito virtual.
Como acaba tu protagonista por indómito, pero que bueno es el relato por original y bien construido.
ResponderEliminarUn abrazo de lso dos.
Me encanta con qué pocos trazos te han bastado para configurar un personaje de tomo y lomo, Mª Jesús. Es de aquellos que por si mismos se bastan para dar perfil y estilo a cualquier historia. La historia, además, vibra de principio a fin y se guarda el as del carcelero en la manga. Nos vemos de nuevo en el juicio de la doña. Seguro.
ResponderEliminarUn micro que es un pastel de esencias y contrastes agridulces. De rechupete. Un abrazo.
Excelente micro, Mª Jesús. Pobre protagonista: solo contra el mundo. E incomprendido.
ResponderEliminarSaludos
Me solidarizo con el protagonista de tu relato. Ya sé que tomarse la justicia por su mano no es lo fetén, pero ante algunas atrocidades desearíamos hacer lo que él hace.
ResponderEliminarNo sé yo si el carcelero sabe con quién se la está jugando...
Estupendo micro, Mª Jesús. Un abrazo.
Crimen y castigo o Héroe y villanos, me gusta este personaje definido con tan pocas palabras, me gusta este micro. Felicidades!!!
ResponderEliminarMuchas gracias a todos los comentaristas por vuestras atinadas aportaciones. Un abrazo para cada uno.
ResponderEliminarEso de tomarse la justicia por la cuenta de uno mismo a veces tiene sus consecuencias...
ResponderEliminarBuen micro, amiga.
Un beso enorme.
Malu.
Hay que reconocer que la Justicia (con mayúsculas) es muy subjetiva. Yo diría que existen tantas "justicias" como individuos, así, cada vez que alguien pide "justicia" lo que está pidiendo es que le den la razón. Para él, es la única razón/justicia verdadera.
ResponderEliminarMuy bueno tu relato. En buena hora se te ocurrió y enhorabuena por ello.
Besos.