Hasta que la muerte los separe
Él arañaba el terciopelo rojo con la furia de un animal de caza. Ella, situada debajo, apenas si tenía fuerzas para seguir respirando con normalidad. Sudores y gritos inundaban la estancia. Un acto desesperado por sentirse vivos.
Algo complicado, dado que el ataúd ya había sido enterrado. Con ellos dentro.
Algo complicado, dado que el ataúd ya había sido enterrado. Con ellos dentro.
No introduces en una situación de alto voltaje erótico para, sabiamnete y sin solución de continuidad, golpearnos con la inclemente y terrible realidad de la escena. Me ha gustado. Suerte y saludos, Carlos.
ResponderEliminarGracias Jesús.Esa era la idea!
ResponderEliminar¡Qué agónica situación! Has logrado transformar una situación pasional en algo verdaderamente tétrico y dramático.
ResponderEliminarFelicidades porque es un relato de los que no crean indiferencia.
Un abrazo, Carlos.
Buenísimo Carlos. Me ha encantado ese giro inesperado. Enhorabuena.
ResponderEliminarWow! Menudo giro inesperado. Erotismo fúnebre y de miedo... creo que es uno de los temores más frecuentes que podamos tener, aunque al menos, en este caso están acompañados. Muy bueno. Un saludo, Carlos.
ResponderEliminarGenialidad. Nos disfrazas un desgarrador relato dónde la muerte tiene todos los hilos en sus manos; y el magnífico disfraz es de frenético erotismo. El final es como ducha helada para la temperatura ascendente del inicio. Mis aplausos por la genialidad.
ResponderEliminarGracias de corazón a todos! grandes palabras para un humilde relato.
ResponderEliminarCarlos nos conduces por el camino del erotismo entre un hombre y una mujer, para después enterrarnos vivos junto a los protagonistas.
ResponderEliminarBuen relato.
Besos.
Veo que hubo pasión en el lugar equivocado... ¿No?
ResponderEliminarY es que... ¿Qué se supone que los llevó a los dos dentro de ese ataúd?... Me da que fueron lejos en el terreno de la "experimentacion". Ya sabes... aquella pregunta recurrente sobre el lugar más raro en el que hayas dado rienda suelta al jolgorio sexual... Ummm... La curiosidad mató al gato jejeje. Si es que no puede ser...😉
En fín... me temo que "ésta" no la van a poder contar. Bueno! Tú nos la has contado por ellos jeje.
Muy bueno tu micro