Solo yo
En el cumpleaños de mi suegra me regaló un aire acondicionado; en el de mi suegro, una televisión; en el de mis padres, un frigorífico; en el de mi mujer un libro; y en el de mi, hija un dibujo.
Para mi cumpleaños lo he pensado y querré un poni.
Para mi cumpleaños lo he pensado y querré un poni.
¡Qué regalazos de cumpleaños! Y encima en celebraciones ajenas. Los demás cumplen años y él recibe regalos. La persona hace válido ese "solo yo" del título; parece que la vida gira en torno a él y le tienen en palmitas.
ResponderEliminarLo gracioso es que, después de recibir tantos regalos, ¡ya no sabe ni que pedir en su propio cumpleaños! La incógnita está en saber quién le hace todos esos presentes: ¿una amante secreta?, ¿él mismo?...
Sea como sea, parece que el protagonista no es sólo el personaje principal de este relato, sino que está acostumbrado a serlo cuando el mérito es de otro.
Simpático relato, Rubén.
Un abrazo.
Muchas gracias por tu comentario Enrique. Un abrazo
EliminarInteresante relato que levanta incógnitas: ¿Por qué este personaje recibe regalos en celebraciones que no son para él? ¿Es acaso cada celebrado el que le da un regalo a él? ¿Habrá alguna razón especial? ¿Es quizás una persona con capacidades diferentes y por ello se le trata así? En fin, un vendaval de preguntas. Me dejas mucho en que pensar Rubén. Felicidades.
ResponderEliminarMuchas gracias Alejandro por tu comentario; siempre me gusta dejar pensamientos en mis relatos, que sea una lectura que deje "posos".
EliminarSaludos.
Me ha gustado mucho el relato; bueno, piensa en el color del bicho por si te lo regalan, pero posiblemente te digan y te guste más, que escribes muy bien.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias por tus palabras José María, me alegro que te haya gustado.
EliminarSaludos.
No sé si va sobre el egoísmo o sobre el altruismo. Te tengo muy confundida Jajaja
ResponderEliminarUn saludo
Un poco de ambas, según se mire jeje. Gracias por el comentario Raquel.
EliminarSaludos.