Aroma

El aroma se desvanecía con la brisa otoñal que entraba por la ventana y por el humo del cigarrillo encendido. ¿Qué hacer? ¿Salir y pedirle que lo abrazara nuevamente para volver a empaparse de ella? Demasiado tarde. El enfermero ordena apagar las luces mientras el somnífero empieza a hacer efecto.
Escrito por Giancarlo Ubillus - Twitter

10 comentarios :

  1. Maria Galerna17/9/17, 11:16

    No hay que dejar escapar las oportunidades.
    No se pierden -como dicen algunos- las aprovechan otros.
    Un buen micro.
    Saludos.

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  2. Muchas gracias por tus palabras María.
    Un abrazo!

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  3. A veces nos damos cuenta demasiado tarde de lo que vamos a ir perdiendo. Perfumes, sonidos, tactos... Es irremediable, pero nos queda la memoria para abrirla de par en par y dar refugio en ella a los recuerdos.
    Qué bonito, Giancarlo.

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  4. Gracias eternas Patricia!
    Un abrazo!

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  5. Hay personas que han nacido para dejar huella en otras. Al imponerse la distancia nos aferramos a detalles como una mirada, unas palabras, un roce, o un aroma. El somnífero solo es un paréntesis. Cuando pase el efecto tu protagonista volverá a tener conciencia de esa mujer, pues forma parte de su ser, aunque él piense que ya es demasiado tarde.
    Un saludo

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  6. Fuerte añoranza en un estado de debilidad. Me pregunto quién es ella: ¿Una mujer? ¿La vida en toda su plenitud?
    Muy bello, Giancarlo.
    Saludos.

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  7. ¡Qué bonito Giancarlo!
    La narración es perfecta, los detalles precisos y el ritmo apropiado. Ese aroma me ha cautivado.
    Enhorabuena, un beso.
    Malu.

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  8. Gracias Malu! Un beso para ti también.

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