Curso de (autoesti)maquillaje
Aumenta la curvatura de tu sonrisa, aquí y aquí. Ahora da brillo a tu actitud, añadiendo toques de asertividad. Así das mejor sensación. Si hasta te ves más alta. Estas tonalidades potencian y favorecen tu autoestima.
Sal a la calle, caminando con decisión al compás de tu sonrisa. Repítelo constantemente.
Sal a la calle, caminando con decisión al compás de tu sonrisa. Repítelo constantemente.
Ya el título promete y el relato no defrauda en absoluto. Esa actitud de tu protagonista tenemos que apuntárnosla y seguirla. Me maravilla tu micro, Maest.
ResponderEliminarUn besote.
Pablo
Es cuestión de creer en uno mismo. Cuesta mucho pero los resultados son más que satisfactorios.
EliminarGracias Pablo
Bonitos y necesarios consejos que a muchos, por desgracia, les resulta imposible seguir. Me gusta, Maest. Saludos y suerte.
ResponderEliminarYa digo que el primer paso es el que más cuesta. Pero pasito a paso se sale y se va llegando.
EliminarGracias Jesús.
Genial Maest. Con sencillez pintas elegancia a un relato que es una receta maravillosa para una vida de contentamiento. Bien dice un dicho bien dicho: "El corazón alegre embellece el rostro". ¡Bien hecho, enhorabuena!
ResponderEliminarHay que buscar las cosas que nos hacen felices y no despegarnos de ellas. Que el mundo ya es bastante triste en los telediarios.
Eliminar¡Muchas gracias!
Saludos Alejandro.
Igual que Pablo, me enganché desde el título. Unos consejos microrrelatados de manera muy agradable. Saludos.
ResponderEliminarEl título es una vuelta a una frase de Juan Jacinto Muñoz Rengel, escritor que estuvo en un festival de literatura fantástica a la que asistí en verano. Decía que tendíamos a maquillar nuestra personalidad e infravalorarnos. Y me dio que pensar.
EliminarGracias Omar. Saludos
Un relato que te deja una sonrisa de oreja a oreja como este merece un lugar destacadísimo en un podio. Yo lo he instalado en mi corazoncillo, junto a alguno que otro tuyo.
ResponderEliminarAbrazotes.
Viniendo de quien viene este comentario ya es más que un premio :) :)
EliminarMe alegro haber acertado con la flecha :) ☼
Gracias guapa. BEsos
El mejor maquillaje, una sonrisa y el ánimo decidido. La actitud es lo que cuenta.
ResponderEliminarSabios consejos, Maest. Un beso.
La actitud lo es todo. O el 90 y muchos por ciento.
EliminarBesos Carmen. Gracias :)
Un simple gesto que aúna los músculos del rostro es capaz de transformar a una persona por dentro y de hacer que fuera todo se suavice, al contrario que un gesto severo, que pone a todos en tensión y produce una malestar inconsciente.
ResponderEliminarUn relato que ofrece la receta para llevar una vida mejor sin necesidad de complejas operaciones de cirujía facial, ni siquiera de caros y sofisticados cosméticos.
Un saludo, Maest
Un gesto que si no se practica cuesta un montón y sientes extraño en tu cara. Pero poco a poco todo se va suavizando, como bien dices Ángel.
EliminarGracias por tu análisis.
Saludos
Totalmente de acuerdo con Ángel, en psicología es la famosa teoría ideomotora de Williams James. ¿Lloró porque estoy triste o estoy triste porque lloro? Veo por tu título que hay algo de sarcasmo con la psicología positiva, tan de moda, y los libros de autoayuda. Y eso me gusta. Le da mucha profundidad al relato. Pero es verdad, que obligarnos a ese maquillaje nos hace sentir mucho mejor, y nos aleja de ciertos vicios como recrearnos en los malo... El cerebro tiene un funcionamiento maravilloso, yo soy una apasionada por eso me puse a estudiar psicología a distancia. Y se pueden domar ciertas emociones, que no digo reprimirlas... O vivir en el autoengaño o en la farsa.
ResponderEliminarUn abrazo Maest.
En los libros de autoayuda hay todo un mundo. Aunque nunca me he acercado a ellos muy a fondo.
EliminarPor tus estudios has sacado más miga y más significado a mi relato que el que yo en principio le había dado. Eso es lo fantástico de escribir y compartir.
Cada cerebro es un mundo.
Gracias por dedicar un poquito de tu tiempo y tus estudios a mi historia.
Abrazos
Muy bueno, amiga. Todo lo que sea levantar el ánimo, bienvenido. Y es cierto al máximo que cuando nos vemos más guapos, nos sentimos mucho mejor. Una cosa tira de la otra. Para ello debemos creer en nosotros y en nuestro potencial. Nunca olvidaré lo que mi tío me decía: "La sonrisa, que nunca se te olvide la sonrisa". Debemos sonreír aunque la procesión vaya por dentro...
ResponderEliminarGenial, Maest.
Besitos.
Un buen consejo para que la convivencia de los humanos, únicos seres que ríen, sea un poco más soportable.
ResponderEliminarA ponerlo en práctica.
Suerte, Maest.
Besito virtual
Es sólo una cuestión de actitud, que canta Fito Páez.
ResponderEliminarAñádele una sonrisa, cuenta Maest.
Gracias por este poquito de optimismo. Siempre viene bien, especialmente tras la vuelta de las vacaciones.
Saludos cordiales.
Este curso debería ser obligatorio para todo ser humano desde los primeros cursos en el colegio.
ResponderEliminarUn beso, Maest.
Malu.