La sutil diferencia entre miedo y terror
Cada mañana, al despertar, con las imágenes aún latentes en la cabeza, transcribía lo soñado en una libreta. Convertía sus pesadillas en historias de dioses primigenios y terror gótico.
Algunas noches, la dulce chica de la panadería se colaba en sus sueños. Pero esos no los escribía. Le daba miedo.
Escrito por Ignacio Urtiaga - Web
Algunas noches, la dulce chica de la panadería se colaba en sus sueños. Pero esos no los escribía. Le daba miedo.
Miedo a que se hiciera realidad la chica de la panadería?
ResponderEliminarUn saludo
Muy bien, Anónim@.
ResponderEliminarA veces, sucede que se afronta mejor el terror que el miedo.
A veces, sucede que se reacciona mejor cuando peor.
¿Por qué no se atiende al miedo razonable hasta que se exacerba y se sale de madre? Me refiero al miedo que advierte, que avisa del peligro inminente.
Ignoro la respuesta a estos misteriosos interrogantes. Es que los humanos son/somos así...
Saludos!
Yo también tengo miedo. En mis sueños aparece un enmascarado que me ata de formas imposibles y me hace fotos. Debería estar aterrorizada, pero es tan meticuloso preparando las escenas, tan atento y dulce, pendiente de que no me aprieten demasiado las cuerdas, que paso las noches deseando que se quite la máscara y me invite a un helado a la luz de la luna. Y tengo miedo.
ResponderEliminarCreo que tu protagonista tiene terror a enamorarse. No le importa tener pesadillas, pasar miedo y recordarlas. Pero el amor le impone más.
ResponderEliminarBuen relato.
Un abrazo, anónimo.
Comentarios y relato muy acertados. Me gusta mucho el tono que le has dado al micro amiga o amigo anónimo. Besos.
ResponderEliminarLas palabras tienen un poder y lo que se escribe puede llegar a cumplirse. Tu protagonista lo sabe, como también es consciente de que le falta el valor necesario para asumir riesgos. Prefiere no probar antes de que puedan romperle el corazón.
ResponderEliminarUn relato bien planteado sobre el miedo a asumir la realidad y a los cambios.
Un saludo
Totalmente de acuerdo. El terror en el fondo es soportable. El miedo es algo muchísimo más terrorífico. Saludos.
ResponderEliminarSensible la diferencia y estupenda la sugerencia que nos dejas
ResponderEliminarEn las distancias cortas es donde uno se la juega, de verdad. (lo sé por los anuncios, claro). De ahí el miedo de tu protagonista en jugarse el corazón.
ResponderEliminarQué raros somos, verdad? Con el terror, en cambio, no hay problema.
Por Dios, ¡qué inquietante! ¿Qué tipo de sueños le asaltan al protagonista? Un buen micro. Saludos
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