Obsolescencia programada
Ni un te quiero. Ni un beso. Ni el cigarrillo de después. Cuando empezamos, estamos dale que te pego, hasta que los vecinos golpean la pared gritando: "¡Ya está bien!". Entonces lo aparto, me doy media vuelta y a dormir, pensando que mañana no se me olvide cambiarle las pilas.
Escrito por Javier Puchades - Web
Hay ejercicios que no necesitan otra compañía que la de la fantasía y, bueno, suficiente carga en la batería. Felices sueños.
ResponderEliminarCuando te quedas sin batería, casi, casi, matarías, jajaja y no quiero pensar en un momento como el que cuento, como para ponerse a buscar.
EliminarGracias, Manuel.
Besitos.
Opino como Manuel, buen acopio de pilas por lo que pueda pasar. Y regalarle unos tapones a los vecinos.
ResponderEliminarEl título me encanta.Buen relato, me ha gustado.
Un abrazo, anónimo.
Ahora mismo bajo a la farmacia y compro unos tapones para los vecinos, no veas como molestan, con sus voces no me puedo concentrar. Aunque también pienso que es envidia, ellos na de na, o son muy silenciosos.
EliminarGracias, Javier.
Besitos.
Picaresco relato. Tanto que decir al respecto pero creo que las palabras se me han quedado sin pilas. Bueno, aplausos al inventor de las baterias. Ja ja. Muy bien logrado el relato.
ResponderEliminarAl inventor de las baterías un monumento, eso sí, que las bajen de precio, se me va el sueldo en eso y no puede ser.
EliminarGracias, Alejandro.
Besitos
¡Qué bueno y divertido relato! Pero hay qué ver como hasta los varones son sustituídos por un simple artefacto a pilas! Buahhh! ¡A lo que hemos llegado! jajaja!
ResponderEliminarM'ancantao!. Enhorabuena Srta. Anónima.
Bueno, un simple artefacto no, tú tenias que ver el artefacto, eso no lo encuentras así como así. Y que luego digan que el tamaño no importa, si yo te contará...
EliminarGracias, Isidro.
Besitos.
Hay que ver, esos amantes tecnológicos, que fríos y escandalosos son. Que no se te olviden las pilas, jajaja. Besos.
ResponderEliminarDe fríos nada, no veas el calor que paso. Y bueno el mío es silencioso, aquí la escandalosa soy yo. Aunque como he dicho arriba, voy a comprarles unos tapones a los vecinos.
EliminarGracias, Olga.
Besitos.
Los hombres necesitan una muñeca hinchable; las mujeres, un simple dildo. Curioso.
ResponderEliminarUn buen micro. Saludos
Pero no puedes comparar, una muñeca hinchable, que encima eso hay que hincharla y claro se pierde la fuerza por la boca. Lo mío más sencillo, más rápido y ya está.
EliminarGracias, Plácido.
Besitos.
Acabo de aprender una palabreja nueva y no es obsolescencia. Divertido micro, aunque los vecinos no piensen lo mismo. Saludos, Anónimo 16.
ResponderEliminarBueno los vecinos ya he pasado a llevarles el regalito de los tapones, no veas que contentos se han puesto.
EliminarEntonces la palabra es "programada" jajaja. Siempre hay que echar unas risas...
Gracias, Juana.
Besitos.
Un micro que se adapta a la era tecnológica, quién iba a pensar que pudiera resolverse con unas pilas jajaja. Saludos.
ResponderEliminarUn monumento a las pilas y a su inventor, bueno y al inventor del cacharro ese que utilizo.
EliminarGracias, Omar.
Besitos.
A falta de pan, buenas son pilas.... Eso es lo que me ha sugerido tu inspirado y en el fondo triste relato.
ResponderEliminarMuy bueno.
Saludos.
Chica de tristezas nada, tu no veas lo bien que me lo paso. También te digo que a nadie le amarga un dulce y de vez en cuando algún bombón pasa por mi cama, no todo va a ser todo tecnología.
EliminarGracias, María Jesús.
Besitos.
Lo bueno es el poco sitio que ocupan en la cama cuando ya no los necesitas... Además no roncan!jajajaaa
ResponderEliminarBuen micro... Anónima? 😉
Tienes razón , ni roncan, ni dejan la ropa tirada, ni molestan y toda la cama para ti o para quien tú quieras, jajaja.
ResponderEliminarGracias, Galilea.
Besitos.