Física cuántica para principiantes
El gato de Schrödinger molestaba al físico que, irritado, lo ató con unas supercuerdas, lo metió en el bolsón de Higgs y lo arrojó a un agujero negro. Pero no sirvió de nada, porque el minino, especialista en saltos cuánticos, siguió burlándose de él e importunándolo desde un universo paralelo.
Enrique, genial y muy simpática historia. Has sabido entrelazar los términos físicos perfectamente. El título es muy bueno.
ResponderEliminarBuen relato, me ha gustado mucho.
Un abrazo, Enrique.
Muchas gracias, Javier, hay una película que se titula Italiano para principiantes, y de ahí me ha venido un poco el título. Luego, con las cuatro cosas que sé de ese mundo fascinante de la física cuántica he intentado componer una historia en la que, conjugando esos escasos conocimientos, primase también el humor.
EliminarSi al ingenio, que es una hoguera lúcida y chisporroteante, le añadimos conocimiento, nace un micro que abre una nueva dimensión, pues se borran las rígidas líneas que conforman los géneros y tu relato es a la vez cuento moderno, mordaz simpatía, tratado de física cuántica refrescante y cincuenta donde la microrrealidad de las partículas desprende ecos de ciencia ficción. Me parece un hallazgo de relato del que he disfrutado mucho con su lectura, pues además, como sabes, soy un curisillo que de vez en cuando asoma los bigotes a ver qué se cuece por los universos paralelos.
ResponderEliminarUn micro y un autor, que más que un descubrimiento, son para descubrirse y aplaudir. Sensacional, Enrique.
Muchas gracias, Manuel, por este comentario que, como todos los tuyos, es sensacional y muy generoso con los méritos que pueda tener esta pequeña historia hecha en plan de divertimento.
EliminarEn cuanto a mis conocimientos de física cuántica no llegan ni a los de principiante del título, así que he sido un tanto osado al atreverme a meter en el microcuento esos términos e ideas, pero pido para mí la bula de la fantasía, a la que, pienso, sí le está permitido husmear donde le venga en gana.
Y ya sabes que en esas curiosidades tuyas por los universos paralelos y hasta por los universos perpendiculares puedes contar conmigo.
Un abrazo.
En esto de la física la mayoría somos neófitos, no llegamos ni a principiantes. A pesar de ello, los grandes conceptos, teorías, hipótesis y supuestos, a muchos nos fascinan. Tú has sabido combinar muy bien varios de los más célebres, haciendo que el famoso gato emule, de alguna forma, al no menos célebre dinosaurio de Monterroso, que no sabemos muy bien cómo, pero siempre está ahí pase lo que pase, con un halo misterioso y pertinaz que lo hace todavía más atractivo. El caso es disfrutar, al tiempo que se fomenta la sana inquietud, algo nada fácil y que consigue con creces tu divertido relato.
ResponderEliminarUn abrazo, Enrique
Las últimas teorías y descubrimientos de la física son, desde luego, fascinantes, y eso que, seguramente, aunque uno lea sobre ello y vea algunos documentales no llega a entender ni un uno por ciento, así que no queda más remedio que suplir ese vacío con la imaginación, que aprovechar esas puertas que nos abre hacia mundos desconocidos para asomar un poco la nariz y perderse en sus perplejidades y paradojas; y luego, intentar no hacer demasiado el ridículo echando mano del humor, así que si el relato resulta divertido mi principal objetivo está conseguido.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, Ángel, un abrazo de vuelta.
Me confieso muy principiante en este, para mí, mágico territorio de la física cuántica. Pero esta condición no me ha impedido disfrutar de tu magnífica historia, en la que combinas los conocimientos físicos, la ciencia ficción, la imaginación y la ironía. El científico no ha encontrado el modo de librarse de tan molesto animal. Y en este mundo paralelo al de la escritura, los lectores sonreímos con cierta complicidad.
ResponderEliminarUn micro brillante, Enrique. Mi más sincera felicitación y un fuerte abrazo.
Yo también soy principiante, o menos, en el mundo de la física cuántica, en el que las matemáticas son importantísimas, y a mí creo que ya se me han olvidado la mayoría de las cosas que aprendí relacionadas con los números, una pena, pues es un universo fascinante, pero somos seres limitados, algunos mucho más que otros, y los días deberían tener 48 horas para poder sacarles un poco de jugo que disimulara nuestra ignorancia.
EliminarAsí que lo que nosotros podemos hacer con teorías tan abstrusas es pasarlas por el tamiz de la imaginación y hacer algo que parezca que tiene algún sentido, aunque si lo leyese un entendido en física cuántica diría que no tiene ninguno, pero la literatura tiene muchos campos, uno de ellos, incluso, es el absurdo, así que a nuestras musas me encomiendo.
Muchas gracias por tu comentario, Carmen y un fuerte abrazo igualmente.
La física de las paradojas, de lo inconcebible, se ha hecho gato. Y ahí está el niño cuántico, escribiendo entre las dimensiones del adulto juguetón para regalarnos un relato donde los conceptos de la física se emplean contra el multidimensional minino que acaba resurgiendo vacilón en divertido un final-principio.
ResponderEliminarDifícil tema el que has escogido, Enrique. Perfectamente resuelto y mejor escrito. Enhorabuena.
Un abrazo.
Más que difícil el tema es dificilísimo, y, seguramente, he incurrido en eso de que la ignorancia es muy atrevida.
EliminarPero lo que sí reivindico es el juego y el humor, para los que no debe haber prohibiciones ni fronteras, así que me he metido a saco en todos esos intríngulis, y he dejado que la fantasía obrase a su antojo, quizá el resultado sea un disparate, pero como en esta página priman las buenas maneras y la generosidad, no me lo hacéis notar. Y lo que más me congratula es leer la palabra divertido, pues esa era una de mis intenciones primordiales.
Muchas gracias por tu comentario, Antonio, un abrazo.
Ingeniosa y divertida historia está que has armado a base de conceptos físicos. Me ha resultado tan visual y simpática me ha recordado a aquellos episodios de Pixie, Dixie y el gato Jinks.
ResponderEliminarGran idea, Tocayo, perfectamente ejecutada.
Enhorabuena y un abrazo.
Son curiosas las asociaciones que hace nuestra mente, supongo que congeniarían de maravilla Pixie, Dixie y el gato Jinks con el gato de Schrödinger, y que, si no fuese por la restricción de las cincuenta palabras, quizá se pudiese escribir una pequeña historia en la que todos ellos fuesen protagonistas. En definitiva, en nuestros mundos de fantasía hay muchas menos imposibilidades que en los mundos de la física, al menos eso creo, tendré que preguntarle a Hawking, Penrose o cualquier otra lumbrera, no vaya a ser que haya dicho una idiotez.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, tocayo, un abrazo.
A mí me parece tu micro una verdadera obra de ingeniería literaria al servicio del gozo de cualquier lector que se asome por aquí.
ResponderEliminarDe un ingenio estratosférico, tan solo el título ya merece un aplauso.
El argumento, una gran ovación.
¡Bravo!
Tendré que copiarme este comentario y, cuando esté bajo de ánimo, leerlo. Pues, aunque no se corresponda la alabanza con la realidad, sabido es que todos –al menos todos quienes entramos dentro de una cierta normalidad- necesitamos algún que otro mimo de vez en cuando, alguna lisonja, pues no sólo de pan vive el hombre, una racioncita de pulpo a la gallega, de vez en cuando, tampoco está de más.
EliminarMe alegra mucho que te haya gustado esta pequeña historia entre lúdica y humorística en la que he utilizado unos términos de los que tengo cuatro nociones de nada.
Muchísimas gracias, Pablo, por tu generosidad. Un abrazo.
Sencillamente genial
ResponderEliminarPues me alegra mucho que así te haya parecido este pequeño divertimento, a veces, ante la maldad y los innumerables problemas del mundo, hay que darse uno respiro.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, Luisa.
Me ha gustado relativamente. Genial, un abrazo
ResponderEliminarNo podía ser de otra forma, dado en el berenjenal de mundo que se me ha ocurrido meterme, en el que la relatividad tiene una importancia vital.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, Arturo, un abrazo.
¡Cuanto paralelismo entre tu ingenioso "cuentito", y el "cuentito" actual que vivimos!
ResponderEliminarUna parábola, o si se quiere metáfora, perfectamente construida con animalito y todo.
Saludos virtuales.
No se me había ocurrido encontrar paralelismos entre mi microcuento y la situación política tan estrambótica y surrealista que vive nuestro país con los afanes independentistas de algunos catalanes, los cuales, no han dudado en actuar como tahúres y en mentir no sé si como bellacos o como Viriatos, esto sin que exima de responsabilidad a la otra parte.
EliminarAl respecto, me acuerdo de un chiste de Forges en el que un personaje le decía al otro: “Que se vayan”. El otro le preguntaba: “¿Quiénes?”. Y él respondía: “Todos”.
Así que me imagino al travieso gato partiéndose el eje desde un universo paralelo ante tanto absurdo.
Muchas gracias por tu comentario, María Jesús, un abrazo.
Enrique, siempre me sorprendes con tu creatividad. Has confeccionado un relato utilizando términos de física cuántica. Yo de eso no sé mucho, pero tu relato me ha encantado.
ResponderEliminarUn micro original y creativo.
Besos apretados.
En lo que me atañe tampoco puedo decir que sepa mucho de física cuántica, cuando he leído algún libro no sé si habré entendido el diez por ciento, en algunos documentales he entendido algo más, y lo que sí parece ser es un mundo extraordinario donde la fantasía puede entrar a saco, con esos viajes en el tiempo, esos universos paralelos, esos agujeros negros y de gusano...
EliminarAsí que ahí me he lanzado con un poco de imaginación y otro poco de humor y me ha salido esto, si he provocado una sonrisa, pues me siento más que satisfecho.
Muchas gracias por tu comentario, Pilar, besos apretados.
Divertido e inteligente micro que se mueve entre la paranoia altanera de Sheldon Cooper y el minimalismo mágico de el profesor Balthazar. También a mí me parece genial. Enhorabuena.
ResponderEliminarNo conozco a los personajes que citas, no sé en qué mundos se mueven, ni cuáles son sus aventuras, pero seguro que son interesantes. Así que si te ha parecido divertido este juego que he hecho con algunos conceptos y teorías de la física cuántica, pues me doy por satisfecho.
EliminarMuchas gracias por el comentario, un abrazo.
Nunca se me había ocurrido sacar al gato de Schrödinger de su caja, y resulta que fuera da mucho juego. Un excelente micro. Enhorabuena, Enrique. Saludos
ResponderEliminarQuizá esa caja tuviese alguna especie de gatera y por ahí se haya escabullido el gato en cuestión. Lo que sí parece es que mientras ha estado en esa caja ha aprendido mucho de física cuántica, tanto como para liársela a un especialista en la materia.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, Plácido, un abrazo.
Divertidísimo, Enrique. Aunque tocas un tema en el que soy ignorante total, no sabes cuántico me ha gustado tu famoso gato volviendo loco al físico. La película cuyo título te inspiró el del micro "Italiano para principiantes" sí la vi y me encantó. Felicidades por ese ingenio e imaginación tan espléndidos. Un abrazo.
ResponderEliminarCuantica física –que diría un maño/a- hay que saber para comprender algo de todos esos nuevos conceptos, muchos de ellos paradójicos. Así que para quienes no somos capaces de comprenderlos ni de lejos, nos queda la fantasía, esa loca de la casa, como decía Santa Teresa, que lo enreda todo, además, he salpimentado la historieta con un poco de humor, si el resultado es apetecible al paladar de la mente, pues el objetivo está conseguido.
ResponderEliminarY estoy de acuerdo en que la película Italiano para principiantes es una gran película, tal es así, que se me quedó grabada, a pesar de que, como acabo de ver, es del año 2000.
Muchas gracias, Juana por tu amable comentario, un abrazo.
Querido Enrique, tengo que decir que se me da fatal la física... y la física cuántica ya ni te digo...
ResponderEliminarDivertido, sabio e ingenioso, siempre nos sorprende usted, señor Angulo. Enhorabuena.
Un beso grande.
Malu.
La física es mucha física, y mis conocimientos de ella son muy escasos, pero sus conceptos e ideas me resultan fascinantes e inspiradores, aunque para ello tienen que pasar por el taller de la fantasía y del humor, y luego sale una cosita como esta.
ResponderEliminarLo que me alegra es que tenga alguna capacidad para sorprender, pues en esta página ya se ha hablado de forma extensa e intensa de lo divino y de lo humano.
Muchas gracias por tu comentario, Malu, un beso grande de vuelta.