La investigación
La búsqueda de la verdad no significaba nada nuevo para él. Localidades, bibliotecas, millares de libros... habían sido escudriñados por sus ojos a lo largo de estos cincuenta años. Se
quitó las gafas, miró a través del cristal de la ventana de su vida y afirmó: "¡Tanto tiempo... para nada!".
Tal vez en el momento menos pensado encuentre esa verdad o tal vez necesite otra vida, depende de cada uno.
ResponderEliminarMe gusta la frase "miró a través del cristal de la ventana de su vida..."
Buen relato, Salvador.
Un abrazo.
Muchas gracias, Javier. El saber no ocupa lugar pero parece ser que sí mucho tiempo.
EliminarUna investigación infructuosa de entrada. A los presuntuosos que se creen en posesión de esa verdad, tiene mucho que enseñarles tu relato, que rezuma la humildad necesaria para saber que ni en una vida ni en varias es posible alcanzar el conocimiento definitivo.
ResponderEliminarUn abrazo y felices fiestas, Salvador
Felices fiestas, Maestro. Muchas gracias por tus palabras.
EliminarClarividente relato, Salvador. Un concepto ese de la verdad demasiado escurridizo tal vez para nuestras limitadas entendederas. Seamos capaces o no de hallarla, mientras tanto podríamos contentarnos con no vivir en la mentira.
ResponderEliminarEnhorabuena y un abrazo.
Muchas gracias, Enrique. Mucho que aprender de tus comentarios
EliminarLa nada, concepto amplio aunque parezca nimio y sin contenido.
ResponderEliminarUna vida que llega a su fin con un sentimiento de vacío.
Me ha gustado la forma de exponerlo.
Feliz 2018 y saludos afectuosos.
Muchas gracias, María Jesús, tus comentarios rebuscan en la profundidad de mis relatos.
EliminarSugerente texto. Puede que para algunos el "simple" hecho de "vivir" esa búsqueda sea lo que ha dado sentido a su vida. Suerte, Salvador. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Jesús. Muchos nos marcamos unas metas que, sin darnos cuenta, llegan a absorbernos por completo.
EliminarHa vivido haciendo lo que más le gusta, a pesar de sus palabras, y eso es mucho. Un beso.
ResponderEliminar"A pesar de sus palabras"... vivió, Maite. ¿Por qué entonces se decepciona? Muchas gracias.
EliminarEs más fácil encontrar la mentira que la verdad y eso decepciona. A veces pienso si la verdad pura existe, pues creo que depende de la realidad en la qué vive cada uno.
EliminarNo sé si ontesté a la pregunta, pero lo he intentado.
Verdaderamente, entre encontrar una verdad o encontrar una mentira... es más ilusionante lo primero. Creo que las veeddades son siempre parciales. Este hombre no supo disfrutar de su descubrimiento "negativo" que, en cierta manera era una manifestación de la verdad que buscaba.
Eliminar¿Pierde el sabio la oportunidad de haber vivido por no haber concluido la inagotable búsqueda de la verdad a la que dedicó subido? Puede que vivir sea soñar, o sea buscar, pero también despertar, y encontrar o no encontrar. No siempre, entiendo, el éxito de la vida está en triunfar.
ResponderEliminarNos pones a meditar con mucho tino, Salvador. Un abrazo, Feliz Año.
...dedicó su vida?
EliminarManuel, las finalidades nos las marcamos nosotros así como nuestras prioridades. Este hombre soñó, buscó y... no encontró. ¿Por qué se manifiesta así de frustrado? ¿Ha perdido? ¿Ha perdido su vida?
EliminarPienso que estamos demasiado influenciados por la idea de éxito que impera en el sistema que vivimos. Consagrar la vida al ideal de la verdad está probablemente abocado al fracaso, pues la verdad absoluta es inasible. Ser consciente de ese fracaso relativo, lo evitaría, pues seguramente a lo largo de su vida se habrán jalonado hitos de sabiduría fuera del alcance de muchos otros que no hayan dedicado su vida a ello. Hacer un balance de la vida en términos absolutos de éxito o fracaso, es lo que lleva a tu protagonista a ver la vida casi vacía, cuando probablemente, mientras la vivió, la sintió casi llena. Es puramente, a mi modesto entender, cuestión de perspectiva, de cambiar las gafas, o cuando menos, el enfoque con el que se mira y se valora lo vivido. Otro abrazo, Salvador.
EliminarEl objetivo que se marca el protagonista es muy difícil de alcanzar, pero le habrá llevado por caminos interesantes, llenos de experiencia. Sin duda, habrá enriquecido su vida. No creo que todo haya sido en vano.
ResponderEliminarEs un viaje hacia Itaca el que nos planteas, Salvador. Feliz 2018 y un abrazo.
Su mente permaneció cerrada a esos logros. De ahí su decepción. Pienso que su frustración se debe a que, en ese instante, supo que su nombre no aparecería en los libros de Ciencias. Éxito o no éxito, como decía,antes Manuel.
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